Bloomberg
Cerca de 800 negocios de musulmanes en Bombay protestan contra el conflicto en gaza boicoteando marcas como Pepsi, Coca-Cola, Kraft y Nestlíé.
Ubicado en una fila irregular de tiendas en el concurrido Bhendi Bazar de Bombay, una zona predominantemente musulmana, el pequeño restaurante Shalimar exhorta a los clientes a rechazar productos fabricados por Pepsi, Kraft y Nestlíé para protestar por la operación militar de Israel en Gaza.
Un póster cerca de la mesa del gerente enumera seis marcas occidentales, incluyendo Coca-Cola, como "israelíes", y dice que no serán servidas como parte de una campaña adoptada por cerca de 800 negocios musulmanes en la ciudad. En India, donde los gobiernos durante díécadas despuíés de la independencia apoyaron la causa palestina, la oposición a Israel a menudo implica la crítica de las naciones europeas y estadounidenses consideradas a favor del estado judío.
"Esta es nuestra forma de mostrar nuestro enojo contra Israel", dijo Omaer Shaikh, quien dirige Shalimar, mientras el callejón empieza a llenarse en las horas de la noche con puestos comerciales improvisados en rodales de bambú y con musulmanes devotos que se preparan para romper su día entero de ayuno de Ramadán. "Para nosotros, Coca-Cola y Pepsi son la sangre humana. Ellos están financiando la guerra contra Palestina".
La protesta llega en medio de los esfuerzos realizados por el reciíén electo gobierno nacionalista hindú del país por forjar vínculos más estrechos con Israel, un desarrollo que ha enfurecido a los musulmanes de la nación, que forman aproximadamente el 13 por ciento de la población. El primer ministro Narendra Modi frustró los intentos de esta semana de algunos legisladores para condenar a Israel.
"Estas son expresiones de frustración por parte de algunos musulmanes que se sienten más inseguros despuíés de que Modi se convirtiera en el primer ministro", dijo Satish Misra, analista de Observer Research Foundation con sede en Nueva Delhi. "La causa palestina es un vehículo para sus sentimientos".
Pepsi, Coca-Cola, Mondelez y Kraft Foods tienen sus sedes en Estados Unidos y la sede de Nestlíé se encuentra en Vevey, Suiza.
"Teniendo en cuenta el carácter local del negocio de Coca-Cola, consideramos que este tipo de acciones afectan principalmente a la economía local, a las empresas locales y a los ciudadanos locales", dijo Kamlesh Kumar Sharma, un portavoz de Coca-Cola en India, en un correo electrónico.
POLíTICA LOCAL
Al rechazar los llamados de algunos legisladores el 21 de julio para una resolución de condena a Israel, el ministro de Relaciones Exteriores de la India, Sushma Swaraj, dijo a la cámara baja del parlamento que la nación debe en cambio apoyar una cesación del fuego entre los dos grupos.
Si bien la demanda de la oposición para una resolución es "parte de la política nacional de la India", el rechazo del gobierno "refleja la posición de la mayor parte de la India", dijo Uday Bhaskar, presidente del Instituto de Oriente Medio con sede en Nueva Delhi.
India fue uno de los países que apoyó una resolución del Consejo de Derechos Humanos de la ONU presentada por Pakistán en el día de ayer para una investigación sobre los presuntos crímenes de guerra cometidos por Israel en Gaza, informó la agencia Press Trust of India.
Los restaurantes de propiedad musulmana están ofreciendo limonada, cócteles sin alcohol y otros favoritos locales en su lugar, dijo Javed Kotwala, que dirige la Persia Darbar. Despuíés de que India abrió su economía, tiene más marcas de bienes de consumo para boicotear que hace alrededor de una díécada, dijo.
"La última vez que hicimos esta protesta fue cuando Estados Unidos invadió Irak", dijo Kotwala. "Fue más difícil entonces. Ahora hay más opciones".
