La mayor compañía de energía de Texas, Energy Future Holdings, -que actualmente atraviesa una situación de quiebra- ha anunciado que va a subastar su filial de distribución Oncor, un negocio valorado en más de 20.000 millones de dólares (unos 15.473 millones de euros). Algunas de las empresas interesadas en hacerse con el control esta compañía, que no está en quiebra, son Iberdrola y la local CenterPoint Energy.
Por el momento, el grupo español no ha querido hacer declaraciones al respecto. No obstante, el abogado que representa a la distribuidora norteamericana en su proceso para salir de la bancarrota adelantó ayer que están esperando que se apruebe esta hoja de ruta y comentó que era probable que la propuesta se haga oficial la próxima semana.
Más ofertas por Oncor
"Espero que seáis conscientes de que estamos en medio de una guerra de ofertas", dijo el abogado Edward Sassower. "Estamos trabajando con diligencia para mantener las ofertas que nos han realizado y lograr atraer nuevos inversores. Las condiciones del mercado son favorables y no queremos cerrarnos a otras oportunidades", añadió el representante de la compañía.
Al hilo de esto, no es la primera oferta que recibe la compañía por la venta de su filial. El pasado mes de junio, el grupo Next Era Energy se precipitó hacia una oferta para controlar Oncor en su totalidad. Sin embargo, la energíética de Texas rechazó la oferta.
De hecho, la propuesta de subasta de la filial ha sido un cambio drástico en la mentalidad de la energíética que, en un primer momento, se planteó permitir a sus acreedores no asegurados hacerse con la compañía.
Energy Future cayó en bancarrota el pasado mes de abril, tras pasar varios años sufriendo la caída de los precios del gas natural, lo que provocó una importante caída de ingresos y la dejó con una deuda insostenible.
Sin embargo, la filial es uno de los activos más importantes de la compañía, ya que era la que tenía mayores redes de transmisión de energía en esta región.
La subasta de activos de una compañía es una forma habitual de conseguir más dinero para devolver el dinero que deben, que en el caso de esta compañía asciende a 40.000 millones de dólares (unos 31.000 millones de euros, aproximadamente).
Por otro lado, la matriz de la compañía se está planteando realizar desinversiones para cubrir con la deuda de 24.000 millones de dólares (unos 18.500 millones de euros, aproximadamente).
Iberdrola, por su parte, tambiíén ha analizado recientemente la posible compra de Cleco en Estados Unidos. Esta operación, según indicaron fuentes del mercado, ha sido abandonada por la compañía que preside Ignacio Galán, que sigue interesada en activos regulados e internacionales, como sería el caso de Oncor.
Sabadell cree que perdería dinero
Los analistas del Banco Sabadell explicaron ayer a 'elEconomista' que, en su opinión, es "poco probable" que Iberdrola adquiera Oncor. En sus palabras, "una adquisición del 100 por ciento de la filial de Energy Future implicaría incrementar la deuda de Iberdrola en un 60 por ciento".
Pese a que son conscientes del interíés de la compañía española en realizar compras fuera de España, esto implicaría tambiíén desinvertir en activos maduros con el riesgo de reinversión implícito. Por ello, consideran que Iberdrola se enfocará en operaciones de menor calibre.