Más de cuatro millones de escoceses han decidido su futuro, pero tambiíén el de los intereses de varias grandes compañías españolas con presencia en la zona. Iberdrola podría recuperar el 3% perdido en bolsa en las últimas dos semanas por la incertidumbre del referíéndum.
Los principales grupos cotizados españoles tienen activos por unos 25.000 millones de libras (31.250 millones de euros) en Escocia.
De esta cantidad, unos 14.000 millones de libras corresponden a Iberdrola, que es dueño de Scottish Power. Algunos inversores temían que un voto favorable a la separación provocara grandes distorsiones en la regulación y funcionamiento del sistema elíéctrico británico, por lo que la cotización del grupo español se vio afectada ante lo ajustado de las encuestas.
Santander ha concedido unos 8.000 millones de libras en príéstamos en Escocia, mientras que Telefónica tiene alrededor del 8% de los clientes de su filial O2 en ese país.
El rechazo a la independencia tambiíén podría allanar la negociación que Ferrovial mantiene para comprar los aeropuertos escoceses de Aberdeen y Glasgow, junto al de Southampton. La empresa española se ha aliado con un fondo de Macquarie para adquirir esas instalaciones a Heathrow Airport Holding por unos 800 millones de libras.
Repsol tambiíén ve reducida la incertidumbre para sus planes de construcción de parques eólicos en Escocia, ya que en caso de secesión el sector de energía renovable podría haber sufrido fuertes cambios regulatorios.
La subida de la libra como consecuencia del mantenimiento de la estructura Reino Unido tambiíén beneficiará a esas compañías al revalorizar sus activos en el país e impulsar los dividendos que reciben cada año desde sus filiales británicas, por unos 2.000 millones de euros.
El voto favorable tambiíén trae algunas incertidumbres, ya que Londres ha prometido transferir más competencias al Gobierno y Parlamento escocíés, incluyendo áreas que podrían afectar a las empresas como la política fiscal.