La segunda compañía china más importante de alimentación, Bright Food, se ha hecho con el control del grupo italiano de aceite de oliva Salov, al que pertenecen las marca Sagra y Filippo Berio. California intenta cerrarse en banda a las importaciones de aceite de oliva europeo
En un comunicado, la empresa china, que está controlada por el Gobierno de Pekín, ha explicado que han comprado a la familia Fontana casi toda su participación en la empresa. El grupo Salov, experto en la producción de aceite de oliva y otro productos relacionados con la aceituna, está presente en 60 países.
Gracias a esta posición internacional, el grupo Salov ingresó 330 millones de euros. Gran parte de estos ingresos proceden de Estados unidos y Gran Bretaña, donde son líderes en el mercado del aceite de oliva.
Abrir fronteras en China
Salov es uno de los principales rivales de Deoleo (dueña de la italiana Bertolli), y al igual que la española, busca incrementar sus ventas globales de aceite de oliva, un producto con cada vez más mercado en el mundo. Momento histórico del aceite de oliva español.
Con esta operación, China entre de lleno en el mercado, y precisamente el país asiático es uno de los focos de interíés. El objetivo es que el aceite haga el mismo camino que hizo hace ya algunos años el vino francíés.
Precisamente, según Bright Food, esta compra responde "a la demanda china de aceite de oliva, los habitantes del país asiático están cada vez más interesados en conseguir una alimentación saludable, semejante a la dieta mediterránea".