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El presidente ruso, Vladimir Putin, llamó a los socios de la futura Unión Económica Euroasiática (UEE) a cerrar fila con una posición solidaria ante el acuerdo de asociación de Ucrania con la Unión Europea.
Putin consideró en una reunión en formato estrecho con los pares de Belarús y Kazajstán, en la capital belarusa, que las negociaciones con Kiev y el bloque comunitario no serán fáciles, y la UEE debe actuar con una postura común, sostuvo.
El mandatario se refirió a las condiciones que deben negociarse para evitar que la asociación comercial de Ucrania con Europa no acarree daños a las economías de los miembros de la Unión Aduanera.
Recordó Putin que en la cita celebrada en agosto con el presidente ucraniano, Piotr Poroshenko, y representantes europeos, "ellos escucharon nuestros argumentos y decidieron aplazar la implementación de la asociación comercial hasta el 31 de diciembre de 2015".
Dijo que se impone persuadir a los socios (europeos) a que renuncien a la contraposición de los modelos de integración europeo y euroasiático, y se coloquen ambos proyectos en igualdad de beneficios.
El significado de la integración euroasiática en la vida de nuestros estados crece de forma objetiva y ello exige de todos nosotros acciones cada vez más coordinadas, expresó en alusión a la UEE, que entrará en vigor el 1 de enero de 2015.
Agregó que hasta fin de año restan cerca de 50 documentos por ratificar y no pocas cuestiones por zanjar. Los tres socios dieron este viernes el visto bueno al ingreso de Armenia en la UEE.
De otro lado, en su intervención en la cumbre presidencial de la Comunidad de Estados Independientes (CEI), Putin indicó que el intercambio comercial al interior del esquema regional disminuyó un 9,0 por ciento( 111 mil millones de dólares) en el primer semestre de 2014 por causas externas y debido a la reorientación de algunos miembros hacia otros mercados.
Las cifras se explican -apuntó- no solo por la desfavorable coyuntura externa, sino como efecto de un cambio en las prioridades económicas de algunos socios de la CEI.
Durante el primer semestre de 2013, el comercio regional ascendió a los 123 mil millones de dólares y totalizó al cierre de año 235 mil millones de dólares, ilustró el gobernante ruso.
La situación en Ucrania y la ausencia del presidente Poroshenko a la cumbre de la CEI fueron otros de los puntos discutidos entre los mandatarios. Kiev envío como representante del país a su embajador en Belarús, Mijail Ezhel.
Para el presidente de Kirguistán, Almazbek Atanbaev, la renuncia al formato de la CEI como plataforma de concertación regional daña más a quienes se niegan.
A pesar del alejamiento ucraniano de sus socios naturales, los jefes de Estado apoyaron el cumplimiento de los acuerdos de Minsk de cara una pacificación del conflicto interno y demandaron el fin de los enfrentamientos en el sureste de ese país y el baño de sangre.
Como colofón de la cumbre se firmaron numerosos documentos y acuerdos concernientes a los temas de seguridad, el control de las fronteras, migración; la lucha contra el narcotráfico y el comercio de personas, y en la esfera de la inteligencia financiera.
