La ministra de Economía, Comercio e Industria de Japón, Yuko Obuchi, ha presentado su dimisión por presunta malversación de fondos.
Según la agencia japonesa Kiodo, Obuchi ha reconocido que dos organizaciones políticas organizaron viajes a sus votantes en 2010 y 2011, por un coste total de 33,8 millones de yenes (cerca de 247.000 euros).
Tras el escándalo Obuchi se ha visto obligada a presentar su carta de dimisión al primer ministro, Shinzo Abe.
La ministra, de 40 años de edad, era una de las cinco mujeres nombradas por Abe en su última reorganización ministerial, y había sido señalada por algunos analistas como posible primera ministra en un futuro.