El BBVA obtuvo un beneficio neto de 1.929 millones de euros hasta septiembre, el 37,3 % inferior al de un año antes, aunque si se descuentan los ingresos extraordinarios obtenidos entonces, la ganancia neta habría crecido el 43,2 %, hasta 2.277 millones, informó hoy la entidad a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
De enero a septiembre de 2013, el BBVA se había anotado importantes ingresos extraordinarios por la venta de sus negocios de reaseguro en España y de pensiones en Míéxico, Colombia y Perú, así como por la puesta en equivalencia de su participación en el banco chino CNBC.
Asimismo, la entidad destaca que el ratio de morosidad bajó por tercer trimestre consecutivo hasta el 6,1% frente al 6,4% de junio y al 6,7% de septiembre de 2013, al tiempo que las coberturas se elevaron hasta el 63% desde el 60% de un año atrás.
El críédito a la clientela de todo el Grupo creció ligeramente, el 1,1%, a cierre de septiembre, hasta alcanzar los 361.084 millones, mientras los depósitos se elevaron el 8,5% y sumaron 329.610 millones.
Test de estríés
El consejero delegado del BBVA, íngel Cano, considera que los test de estríés llevados a cabo por el BCE y la Autoridad Bancaria Europea son el ejercicio más exigente al que se ha sometido el sector y sitúan al sistema financiero español como uno de los más solventes de todo el continente.
El “número dos†de la entidad ha explicado en declaraciones a Efe que son “muy buenas noticias†para ayudar a la recuperación económica de España, al margen de que el ejercicio ha puesto de manifiesto la “fuerte solvencia†del BBVA y su capacidad para resistir escenarios adversos.
Según los test de estríés, el grupo que preside Francisco González mantiene en el peor de los escenarios previstos una solvencia del 8,97 %, que llega al 9 % a final de 2016, lo que supone un superávit de capital de 13.223 millones o 4,5 puntos porcentuales sobre el mínimo de capital exigido en las pruebas.