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Un estudio del Instituto de Estudios Fiscales del Reino Unido (IFS) revela que el número de británicos viviendo en extrema pobreza se incrementó en alrededor de 300 mil, debido al alto costo de la vida.
El informe califica de "altísimos" los precios de los alimentos y el combustible, factor de gran impacto en la pasada díécada en la economía de muchas familias, cuyos gastos en artículos de primera necesitad exceden sus presupuestos.
Por el contrario, asegura el IFS, citado por el diario The Guardian, los ricos se beneficiaron por las reducciones en las tarifas hipotecarias y en los gastos automovilísticos.
En el período 2008-2014, el costo en electricidad se incrementó un 67 por ciento en el Reino Unido, mientras los alimentos subieron un 32 por ciento, indica el reporte.
El IFS concluye que la inflación en los precios desde 2008 provocó el empobrecimiento de miles de británicos, cerca de 300 mil desde el anterior registro.
De acuerdo con la experta Katie Schmuecker, el rápido incremento de los costos de la vida causa problemas para todos, pero son las familias de menos ingresos las que más sufrieron el aumento de los precios en los recientes 10 años.
Cualquier proyecto que salga del próximo Gobierno para mejorar los estándares de vida debe estar enfocado en el alto costo de los objetos de primera necesidad, así como en potenciar la subida de los salarios, sentenció Schmuecker.