Abengoa se enfrenta a una querella criminal en la Audiencia Nacional despuíés de que la agencia de calificación Fitch emitiera un informe el pasado 14 de noviembre denunciando que la deuda neta corporativa de la compañía andaluza duplicaba la contabilizada por íésta, que presentó sus resultados a septiembre justo dos días antes. Es decir, que en lugar de ser de 2,1 veces ebitda (2.125 millones), realmente sería de 4 veces según Fitch (4.196 millones).
La empresa no incluyó como deuda corporativo una emisión de 481 millones, cerrada el 30 de septiembre y que respaldará futuros proyectos de energías renovables -y que está garantizada por la matriz- ni otros 1.592 millones previos en la misma situación.
Total, 2.073 millones de discrepancia entre empresa y Fitch, de los que 1.592 millones sí estaban en el balance bajo otro epígrafe-deuda sin recurso, no corporativa- y los otros 481 no aparecían. Moody's mantuvo ayer en B2 con perspectiva estable el rating de esta deuda sin recurso, pero alertó de su fuerte aumento desde final de 2013, cuando sólo era de 600 millones, hasta 1.592 millones a septiembre.
Delitos
La querella, que se presentará hoy por una plataforma de minoritarios representada por el bufete Yvancos Abogados, se dirige no sólo contra el consejo de administración de Abengoa, sino tambiíén contra el socio de Deloitte, Manuel Arranz, que realizó una revisión limitada de las cuentas a septiembre tras la crisis bursátil. Tambiíén irá contra la presidenta de la CNMV, Elvira Rodríguez, por su falta de "diligencia, vigilancia y determinación" ante la situación creada. Abengoa envió el jueves 13 un hecho relevante que, lejos de calmar al mercado, lo incendió más. La empresa ha señalado que la crisis bursátil se debió a un "malentendido" sobre la deuda.
Según la querella, a la que ha tenido acceso elEconomista, los consejeros de la empresa habrían cometido presuntamente varios delitos societarios del Código Penal. Se trataría, en concreto, de falseamiento de cuentas y administración fraudulenta o desleal.
Los querellantes recuerdan que "debido a los repentinos cambios en relación a los orígenes y a la verdadera identidad de la deuda neta corporativa de la sociedad, Abengoa se desploma el viernes 14 de noviembre, llegando las píérdidas a alcanzar el 50%", hasta 1,5 euros. "Tal situación generó cuantiosas píérdidas para los inversores". Abengoa cerró ayer a 2,05 euros, con una caída del 7,66%, la mayor del íbex.