EFE
Las autoridades chinas han decidido excluir los productos de importantes firmas tecnológicas estadounidenses como Apple o Cisco de su lista de artículos permitidos para compras estatales, como medida de protección tras las revelaciones sobre el masivo ciberespionaje cometido por EEUU al gigante asiático.
Según publican hoy medios oficiales, las autoridades buscan con esta medida garantizar la seguridad de su información, dando un mayor papel a empresas locales como Huawei, Lenovo o ZTE, sobre las que sí tienen control.
Según datos oficiales, el número de productos de importantes firmas tecnológicas como Intel se ha visto reducido considerablemente en la lista del Centro Estatal de Adquisición del Gobierno, donde, por ejemplo, ya no aparecen bienes de empresas como el gigante tecnológico Cisco.
En 2012, esta empresa estadounidense contaba con veinte productos en la lista de compras oficiales del Estado chino.
Esta decisión del Gobierno chino se produce despuíés de las revelaciones del analista Edward Snowden en 2013 sobre el masivo ciberespionaje realizado por Estados Unidos a países como China.
Según recoge el diario China Daily, Cisco atribuyó lo ocurrido a las "preocupaciones geopolíticas", mientras que Intel explicó por su parte que está trabajando con el Gobierno chino "a distintos niveles", sin dar más detalle.
Zuo Xiaodong, vicepresidente del Instituto chino de Investigación de la Seguridad de la Información, un centro de estudios gubernamental, ratificó los temores del Gobierno respecto a la tecnología extranjera.
"Utilizar más productos de compañías locales en sectores importantes tranquiliza a Pekín sobre la seguridad de su información", señaló el experto.
A finales del año pasado, diferentes medios -recuerda el citado rotativo- publicaron que China excluirá definitivamente los productos tecnológicos del extranjero de su compra de lista estatales para 2020.
Al respecto, Zuo señaló que los reguladores no tienen un "plan de acción" para dejar de utilizar productos foráneos, si bien aseguró que el país asiático está "claramente a favor de los actores locales".
Preguntado por ello, el portavoz del Ministerio de Exteriores chino Hong Lei defendió en rueda de prensa que China está abierta a la entrada de empresas extranjeras en el país asiático, si bien íéstas, puntualizó, "deben ajustarse a las normas establecidas" en la segunda economía mundial.