The Associated Press
Los magnates del internet como Jeff Bezos, el dueño de Amazon, no son los únicos que se devoran la llamada "propiedad raíz" en el sur de California. Si bien los multimillonarios de Silicon Valley se han destacado últimamente por la compra de mansiones extravagantes en Los íngeles, la ciudad atrae cada vez más a los creadores de nuevas empresas y los "inversionistas angelicales" dispuestos a respaldarlos.
La ciudad los atrae por varias razones, tanto personales como financieras y laborales, informó el diario Los Angeles Times. Les ofrece una comunidad tecnológica creciente, un clima más templado y más espacio por menos dinero.
"En los últimos años hemos visto un aumento de compradores del sector tecnológico: algunos se mudan a Los íngeles y otros adquieren una segunda vivienda aquí, como una especie de refugio de paz", dijo Charles Black, vicepresidente ejecutivo de mercadeo y desarrollo estratíégico de la inmobiliaria Hilton & Hyland.
La zona de Los íngeles-Long Beach pasó a ocupar un puesto entre las primeras cinco áreas metropolitanas del país en materia de inversiones de riesgo en 2014. Se registraron 171 transacciones por un valor total de 2.050 millones de dólares, según la cámara que agrupa a los inversionistas de riesgo.
Entre las adquisiciones de mayor repercusión figura la compra de una mansión y terreno en Beverly Hills por Jeff Bezos, quien pagó 24,5 millones de dólares. Sean Parker, un cofundador de Napster y uno de los primeros directivos de Facebook, compró la mansión de Ellen DeGeneres en Holmby Hills por 55 millones. El multimillonario sueco Markus Persson, creador de "Minecraft", invirtió 70 millones en una mansión en Beverly Hills provista de una sala con expendio de golosinas que costó 200,000 dólares.
Sin embargo, esto es apenas una parte de la historia.
El empresario e inversionista Justin Yoshimura, de 25 años, vive en San Francisco, acaba de comprar por 2,04 millones de dólares una casa de tres dormitorios en la localidad playera de Santa Mónica para los fines de semana.
"Comparado con San Francisco es muy barato", dijo al diario. "Tengo un jardín con piscina y una casa hermosa por menos de lo que pagaría un apartamento de las mismas dimensiones en San Francisco".
La agente inmobiliaria Tami Pardee dice que los magnates de Silicon Valley constituyen el 10% de su clientela actual. Sus presupuestos son altos: entre 2 y 5 millones de dólares por una vivienda.
"Compran segundas viviendas, o terceras o cuartas", dijo. "Es muy común últimamente".
