La recuperación económica ya se deja notar en el beneficio bruto de las compañías no financieras del Ibex, que está a punto de regresar a los niveles más altos de su historia. Según las previsiones del consenso de mercado que recoge FactSet, alcanzará en 2015 los 69.900 millones de euros, con lo que se quedará a un 8,4% de su máximo de 15 años (los cerca de 75.500 millones alcanzados en 2007). Una cota, íésta de 2007, que sí logrará recobrar el año que viene, al rondar los 75.000 millones (ver gráfico).
Para realizar estos cálculos se ha excluido a todas las compañías financieras del Ibex y tambiíén a Dia, que comenzó a cotizar en 2011 y para la que el consenso no recoge una serie histórica de datos.
¿Quíé mensaje nos traslada ese buen tono del ebitda (beneficio antes de intereses, impuestos, depreciaciones y amortizaciones) de las empresas no financieras del principal índice de la bolsa española? "Esta mejora es reflejo del efecto de los distintos planes de eficiencia y de ajuste de costes que han llevado a cabo las compañías del índice durante la crisis", explica íngel Píérez, analista de Renta 4.
Recordemos que la cifra esperada para este año supera en un 26% a la de 2014; no se veía una subida de tal calibre precisamente desde 2007, el año estrella del beneficio bruto. De hecho, en los tres últimos años el ebitda -indicador que permite ver con claridad con quíé músculo cuentan las compañías- de los valores no financieros del Ibex experimentó recortes, no alzas.
Sin traslado al beneficio neto
Pero esa recuperación aún no se traslada, sin embargo, al beneficio neto: íéste ascenderá este año, en el conjunto de las compañías analizadas, a 21.700 millones de euros, es decir, sigue a un 60% de los 35.000 millones de euros de ganancias que alcanzaron hace ocho años, en 2007.
Josíé Luis Herrera, de CMC Markets, atribuye este hecho a dos factores: a las provisiones propias de la incertidumbre de los años de crisis y al aumento del riesgo país, que se han traducido en un espectacular aumento de la prima de riesgo en algunos periodos y que ha encarecido el acceso a la financiación (que, a su vez, repercute en los intereses y lastra el beneficio neto). Cuando se restablezca el críédito, añade Herrera, "algo que ocurrirá entre este año y el próximo, no será tan necesario dotar de provisiones ni aplicar depreciaciones en balances, por lo que los beneficios netos previsiblemente aumentarán". Las empresas han trabajado, por así decirlo, como hormigas, a la espera de que más tarde llegue el momento en que puedan comportarse como cigarras, convirtiendo las provisiones en ganancias.
Por su parte, Josíé Lizán, de Auriga SV, considera que hasta que las divisas no dejen de afectar a los resultados y los bancos no terminen de sanear sus balances "será difícil que veamos ganancias netas superiores a los vistos en 2007".
En opinión de Josíé Luis Martínez Campuzano, estratega de Citi en España, la mejora del ebitda revela "algo muy positivo: que las empresas españolas ya han recuperado buena parte de los beneficios perdidos". Campuzano compara la evolución de las ganancias brutas con la del PIB del país, que tambiíén sigue a un 6 o 7% de las cotas de 2007. Y añade que, a diferencia de lo que ocurre en España, los ebitdas estadounidenses ya han recobrado niveles de hace ocho años.
Si nos fijamos en los valores del selectivo español, Inditex es uno de los que más han aportado al beneficio bruto del conjunto: la textil sólo lo ha visto reducirse, y muy tímidamente, en 2013, cuando se redujo un 0,1%. Pero en plena crisis ha visto crecer su ebitda, de media, un 10% anual (mientras que, en el conjunto del índice, este indicador caía en 2008, 2009, 2012, 13 y 14). Los analistas esperan que el grupo alcance este año su mayor beneficio bruto, los 4.730 millones. Pero no es la única: 14 empresas registrarán en 2015 su ebitda más alto desde 2000. Entre ellas, Abengoa, Abertis, Acciona, Gamesa, Grifols u OHL (ver gráfico).
En el otro lado de la balanza, algunos valores continúan muy lejos, a nivel de ebitda, de sus máximos: el de Ferrovial, que será de 1.000 millones este año, tendría que triplicarse para recuperar los 3.017 millones de 2007. Y Endesa tendría que duplicarlo para regresar a aquellos 6.200 de 2006. Debe tenerse en cuenta, por otro lado, que el negocio de esta compañía, antes multinacional, ahora es fundamentalmente domíéstico, lo que lógicamente afecta a sus ingresos y beneficios.
María Domínguez