Las bolsas de Estados Unidos han cerrado la sesión del jueves con dudas generalizadas, que dejan a los principales selectivos en el mismo punto del que partían. El Dow Jones de industriales se deja apenas el 0,03% y cierra en 18.108 puntos, mientras que el S&P 500 baja el 0,08% hasta los 2.105. El Nasdaq 100 pierde el 0,13% y se queda en los 4.418 enteros.
La jornada comenzó con píérdidas y se mantuvo así hasta dos horas antes del cierre, cuando un ligero avance en los precios del petróleo impulsó al alza el mercado. La tendencia, en cambio, no se pudo mantener, y en la última hora el mercado se comportó muy irregular, apostando por las ventas y las compras indistintamente, hasta terminar en rojo en sus principales indicadores.
Fue una sesión muy irregular, movida por razones internas y por incertidumbres externas, incluyendo declaraciones de autoridades de la Reserva Federal que alimentaron el debate sobre la fecha en que pueden subir las tasas de interíés.
En la primera parte de la sesión impactó el dato de que la cifra semanal de solicitudes de subsidio subió en 12.000 casos la semana pasada y llegó hasta el nivel máximo en seis semanas, por encima de los cálculos de los analistas.
Ello generó unas píérdidas en Wall Street que, unidas a la incertidumbre sobre la crisis griega, colocaron en negativo los indicadores del mercado, hasta que el ligero avance del precio del crudo lo resucitó parcialmente, aunque no lo suficiente.
El petróleo intermedio de Texas (WTI) subió hoy un 0,56% y alcanzó su mejor precio en lo que va de año hasta los 56,71 dólares, todavía bajo los efectos de las grandes subidas de ayer y tras las expectativas de avance en la demanda de crudo a nivel internacional.
Al final de la sesión de operaciones a viva voz en la Bolsa Mercantil de Nueva York (Nymex), los contratos futuros del WTI para entrega en mayo subieron 32 centavos de dólar respecto al cierre de la jornada anterior.
Tras la subida de más de un 5% que llevó ayer al petróleo de referencia en Estados Unidos a su mejor precio en un año fatídico para el crudo, hoy fue una jornada de inercia debido a una noticia, por fin, de beneficio a largo plazo para los precios del combustible.
La Agencia Internacional de Energía (AIE) informó ayer de que la demanda global de crudo crecerá en 1,1 millones de barriles diarios este año, muy por encima de los 700.000 barriles del crecimiento del año pasado, y arrojó esperanza ante una crisis de exceso de oferta que ha llevado al petróleo ha perder hasta un 60 % de su valor en el mercado
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