ELMUNDO.ES | EFE
MADRID | SANTIAGO DE COMPOSTELA.- El ministro de Trabajo, Celestino Corbacho, ha asegurado que, según los datos de los que dispone, la crisis financiera "debería estar finiquitada" en dos meses una vez que retorne la confianza a los mercados.
Corbacho ha explicado, tras mantener una reunión con el presidente de la Xunta de Galicia, Emilio Píérez Touriño, que a la actual crisis global a veces es "difícil de verle la cara", aunque todas las previsiones apuntan a que la crisis financiera "se debe acabar y pronto".
"En el Banco Central Europeo cada día entran millones y millones de euros a depósito, pero no van a críéditos a las entidades financieras. El negocio de una entidad financiera está en los críéditos que da y en los intereses que cobra. Todas esas previsiones llevan a pensar que la crisis financiera en dos meses debería estar finiquitada y despuíés debería comenzar un factor de confianza", concluyó.
Según el ministro, las medidas puestas en marcha por la Unión Europea y Estados Unidos deberían aportar liquidez a los mercados y los bancos deberían comenzar a conceder críéditos, ya que, según explicó, "no es que no haya dinero".
Hace apenas un mes, el ministro de Economía y Hacienda y vicepresidente segundo del Gobierno, Pedro Solbes, advirtió de que "aún estamos lejos de volver a la normalidad" dado el recrudecimiento de la falta de liquidez que vive el sistema financiero.
El propio Solbes reconoció que es la peor crisis que recuerda. Esta situación de bloqueo se debe a que los bancos no se prestan dinero como lo harían en condiciones normales porque no se fían unos de otros ante la incertidumbre sobre la situación económica de muchas entidades.
El mayor paro en cuatro años
Uno de las consecuencias más palpables de esta crisis es el aumento del desempleo. La tasa de paro se incrementó hasta el 11,3% en el tercer trimestre, el peor dato en cuatro años, según la Encuesta de Población Activa (EPA). El dato "no es bueno", ha admitido Corbacho, aunque ha añadido "que no sorprende" a las previsiones hechas por el propio Gobierno.
El ministro ha querido recordar otros datos de la EPA, como que la población activa ha aumentado en 600.000 personas. "Los flujos migratorios han crecido a tal ritmo que el propio mercado no ha podido absorber una parte de ese crecimiento de la población activa", ha explicado. No obstante, ha añadido, no quiere "restar importancia" al repunte del desempleo