El Banco de España prevíé una caída del PIB por primera vez desde 1993
Publicado por Expansión.com
España estaría al borde de la recesión tras contraerse el PIB un 0,2% en el tercer trimestre, si se cumplen las previsiones del Banco de España. De confirmarse este dato y teniendo en cuenta que todos los pronósticos apuntan a una mayor desaceleración de la economía española en los próximos meses, España se encuentra al borde de la recesión económica, que se podría prolongar más allá del año 2008.
No ocurría desde hace quince años. El Banco de España augura una caída del PIB en el tercer trimestre, el indicador ha pasado a moverse en la horquilla del 'cero coma'. Así, la economía española ha registrado un crecimiento aminorado: el del 0,2% en el tercer trimestre del año respecto al trimestre anterior.
En el texto del Boletín emitido por el Banco de España se detalla que "los indicadores referidos al tercer trimestre de 2008 muestran una intensificación del ajuste, en un entorno en el que el profundo deterioro que están experimentando los mercados financieros internacionales desde mediados de septiembre ha agravado la situación de incertidumbre", subraya la entidad. El organismo explica que este contexto ha tenido importantes efectos sobre la confianza de los agentes y ha supuesto un endurecimiento adicional de las condiciones de financiación.
De confirmarse este dato y teniendo en cuenta que todos los pronósticos apuntan a una mayor desaceleración de la economía española en los próximos meses, España se encuentra al borde de la recesión económica, que se podría prolongar más allá del año 2008.
España se encuentra al borde de la recesión económica, que se podría prolongar más allá del año 2008
La autoridad monetaria ha indicado que detrás de esta desaceleración del PIB se encuentra el "significativo recorte" de la tasa de avance de la demanda nacional, que se situó en el 0,3% en tíérminos interanuales, frente a la demanda exterior, que volvió a mejorar entre julio y septiembre, hasta situarse en un 0,6%.
Consumo de los hogares
A la desaceleración de la demanda interna contribuyeron todos sus componentes, aunque de forma más destacada la inversión residencial y el consumo de los hogares, mientras que la mejora de la demanda externa se debió a la "sensible reducción" de la tasa de crecimiento de las importaciones y al mantenimiento de un cierto dinamismo de las ventas al exterior.
Por el lado de la oferta, en el tercer trimestre prosiguió la "intensa corrección" de la actividad en el sector de la construcción y la caída del valor añadido de las manufacturas, a la vez que se iniciaba un proceso de destrucción de empleo que se extendió a las distintas ramas productivas, excepto a los servicios.
