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El precio del oro subió ayer más del cinco por ciento en Nueva York, impulsado por la incertidumbre financiera, la depreciación del dólar y la caída de los mercados bursátiles globales, dijeron operadores.
Esos factores llevaron a los inversores a buscar refugio en el metal dorado, cuya cotización este jueves llegó a tocar el mayor nivel en los 12 meses más recientes.
El oro al contado ganó un cinco por ciento, a 1,257,26 dólares la onza, luego de escalar en la sesión hasta 1,260,60 dólares.
En el caso de los futuros del referencial del oro para entrega en abril, estos progresaron un 4,5 por ciento, a 1,247,80 dólares la onza.
Analistas dijeron que el oro al contado acumula en lo que va de año un alza de casi un 18 por ciento, luego de un trienio de descensos.
El monto negociado del contrato más activo de los futuros del lingote alcanzó su mayor nivel desde el 2014, favorecido por la entrada de inversores al mercado.
Los operadores aludieron a temores de inestabilidad financiera y el hundimiento de las acciones a ambos lados del Atlántico.
Coincidieron en que los inversores están preocupados en relación con rentabilidad de los bancos en un contexto de díébil crecimiento económico y bajas tasas de interíés.
Concordaron en que la demanda por el metal amarillo se vio tambiíén estimulada por la caída de los rendimientos de los bonos del Tesoro de Estados Unidos.
