07 de Noviembre de 2008, 11:25pm ET
Washington, 7 nov (EFE).- El índice de desempleo entre los hispanos de Estados Unidos subió al 8,8 por ciento en octubre, un mes en el que el número total de desempleados alcanzó su máximo en un cuarto de siglo, más de 10 millones de personas.
Según las cifras que divulgó hoy el Departamento de Trabajo, el índice general de desempleo subió del 6,1 por ciento en septiembre al 6,5 por ciento en octubre, un mes cuando la economía tuvo una píérdida neta de 240.000 puestos de trabajo.
En el mes anterior habían desaparecido 284.000 empleos, la mayor píérdida neta desde el 2001, la última vez que EEUU estuvo en una recesión.
De acuerdo con el informe del gobierno, el número de hispanos sin empleo subió de 1,727 millones en septiembre a 1,967 millones en octubre.
Entre enero y octubre la economía ha tenido una disminución de casi 1,2 millones de puestos de trabajo, de los cuales 651.000 se perdieron entre agosto y octubre, de acuerdo con las cifras del gobierno.
"Parece que una economía que andaba a los tropezones recibió un puntapiíé que la empujó escaleras abajo", comentó Lawrence Mishel, presidente del Instituto de Política Económica (EPI), un grupo independiente de estudios con sede en Washington.
En octubre, según las cifras oficiales, la muchedumbre de desocupados creció en 603.000 y llegó a 10,1 millones de personas -la mayor en un cuarto de siglo- mientras que la cifra de personas que trabajan a tiempo parcial aumentó en 645.000 y llegó a 6,7 millones.
"í‰ste es un momento crítico", dijo el ex secretario del Tesoro, Lawrence Summers, a quien se menciona como posible jefe de ese ministerio en el gobierno que presidirá desde enero el demócrata Barack Obama
El presidente George W. Bush señaló que "los números en el informe sobre el desempleo reflejan los retos difíciles que enfrenta nuestra economía".
"Estamos en medio de una crisis financiera global", añadió. "El gobierno ha tomado medidas firmes y decisivas para atender esta situación, pero se necesita tiempo para que hagan su impacto pleno".
Los datos del Departamento de Trabajo agregaron urgencia a la actuación del futuro Gobierno de Obama, quien hoy se reúne con sus principales asesores en materia económica, que incluyen ex funcionarios del Tesoro y de la Reserva Federal, y prominentes figuras del sector privado.
Por sectores, el manufacturero perdió 90.000 empleos, y la construcción otros 49.000, con lo que la tasa de paro de este último ha alcanzado el 10,8 por ciento, el doble de hace un año.
"Es, probablemente, la situación económica más grave que hemos encarado desde la Gran Depresión", de los años 1930, agregó Summers en declaraciones para el programa "Today" de la cadena NBC de televisión.
La última vez cuando el índice de desempleo llegó al 6,5 por ciento de la fuerza laboral fue en marzo de 1994.
"Lo que vemos es una aceleración de la píérdida de empleos, y que se acerca al 12 por ciento el índice de personas que no tienen trabajo o que tienen sub-empleos", señaló la economista del EPI, Heidi Shierholz.
Los datos tambiíén dan ímpetu a los demócratas en el Congreso que han propuesto un nuevo conjunto de medidas de estímulo económico que, según ellos, debería aprobarse y aplicarse antes de fin de año.
"La economía ha ingresado en un tramo muy profundo de recesión y podría permanecer allí por seis o nueve meses", según John Herrmann, presidente de la firma de análisis Hermann Forecasting, de Nueva York.
"Estas cifras implican la necesidad de un estímulo de casi 500.000 millones de dólares que se aplique desde lo que queda de este año y en todo 2009", agregó Herrmann.
El Congreso aprobó y el presidente George W. Bush promulgó en febrero pasado un estímulo que consistió en la devolución de unos 150.000 millones de dólares en impuestos, distribuida entre unos 130 millones de contribuyentes.
A pesar de la inyección de aliento al consumo, la economía registró en el tercer trimestre la primera contracción desde la recesión de 2001.