Por... JAVIER PASTOR
Hablamos a menudo sobre las promesas que nuevas tecnologías ofrecen a la hora de revolucionar esas baterías que limitan a nuestros dispositivos móviles, pero, ¿y si no fueran necesarias baterías para alimentarlos y potenciar sus prestaciones?
Eso es lo que un grupo de investigadores de la Universidad de Washington en colaboración con la TU Delft ha logrado con WISP (Wireless Identification and Sensing Platform), un pequeño ordenador con un sensor que no necesita batería ni estar conectado a una corriente para funcionar. En lugar de eso hace uso de una serie de ondas de radio emitidas desde un lector RFID.
Aplicaciones en todo tipo de campos
Este tipo de sistema podría ser el futuro de dispositivos muy de moda actualmente: el procesador del WISP funciona a una frecuencia de reloj similar a la de las pulseras cuantificadoras de Fitbit, y como en esos casos es posible integrar distintos sensores.
Como decía Aaron Parks, uno de sus creadores, "no va a ejecutar un videojuego, pero puede monitorizar los datos de los sensores y llevar a cabo algunas tareas mínimas de computación, además de comunicarse con el mundo exterior".
Para recolectar esa energía se hace una retrodispersión (backscattering) de ondas de radio que llegan al dispositivo, y el ancho de banda es muy decente y se sitúa en la línea del que ofrece el modo Low Energy de la tecnología Bluetooth. El proyecto lleva en marcha desde 2006, pero esa capacidad de programación remota e inalámbrica -para actualizar el firmware del dispositivo- es especialmente interesante.
Para los creadores de WISP estos dispositivos podrían ser interesantes para segmentos como el de la construcción, donde sería posible situar sensores en ciertas estructuras que informaran del estado del edificio o si íéste, por ejemplo, ha sido dañado por un terremoto. Tambiíén para dispositivos implantables que monitorizarían la salud de un paciente. Ahora queda por ver, como siempre, si esos proyectos de futuro se hacen realidad.