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La incertidumbre entre las empresas de Amíérica Central y el Caribe crece hoy cuando instituciones financieras mundiales cortan relaciones con sus corresponsales bancarios, alertó el Banco Mundial (BM).
Las medidas surgen al arreciarse las regulaciones contra el lavado de dinero y el fraude, por lo que esas entidades buscan salir de los mercados más riesgosos, siendo el Caribe la región más afectada del mundo.
Un sondeo del BM muestra que esa tendencia se aprecia desde 2015 y ejemplifica que 15 de 20 instituciones financieras analizadas disminuyeron sus relaciones con bancos corresponsales de la zona.
Entre los países más afectados se encuentra Jamaica, donde al igual que en otras naciones, la inestabilidad del mercado genera temor frente a la dependencia de acuerdos financieros a largo plazo.
Dentro de esa tendencia, en Panamá más de 20 cuentas en bancos corresponsales fueron canceladas desde que a esa nación la colocaron en 2014 dentro una lista gris por el organismo internacional contra el lavado de dinero, con sede en París.
De acuerdo con el vicepresidente del BM para Amíérica Latina y el Caribe, Jorge Familiar, de concretarse alguno de esos riesgos y una empresa pierde su intermediación bancaria de un día para el otro los costos serían muy importantes, e incluso se afectarían transacciones internacionales como el envío de remesas.
El análisis del BM destacó que la mayor cantidad de bancos que rompieron relaciones con sus pares intermediarios se ubica en Estados Unidos, nación con fuertes vínculos comerciales en la región caribeña.
Las agencias corresponsales son aquellos que prestan servicios a otros bancos cuando no poseen sucursales en el país y liquidan sus operaciones mediante la compensación.
