La agencia de calificación financiera Moody's ha decidido rebajar su perspectiva de la banca española de positiva a estable ante los retos crecientes para mejorar la rentabilidad y a pesar de que "el saludable crecimiento económico" –está ayudando a los bancos a superar los problemas arrastrados desde la reciente crisis bancaria.
“El buen comportamiento de la economía española está ayudando a que los bancos del país mejoren la calidad de sus activos, por años el lastre más importante del sistema bancario†señala Alberto Postigo, Senior Vice President – Credit Officer de Moody’s. “Sin embargo, la rentabilidad del sistema se enfrenta a retos crecientes debido a los tipos de interíés persistentemente bajos y al desapalancamiento, factores que están erosionando la capacidad de generar ingresosâ€.
La economía española ha experimentado recientemente un fuerte crecimiento, a un ritmo del 3.2% en 2015 y de 3.4% durante el primer trimestre de 2016 en tíérminos reales anuales. No obstante, Moody’s considera que este fuerte crecimiento es más cíclico que estructural – impulsado por factores como los bajos precios del petróleo, las mejores condiciones de financiación y el crecimiento del turismo – y que la inercia de crecimiento terminará por debilitarse. Aun así, la agencia de rating espera que la economía española crezca a una tasa saludable de 2.9% en 2016 y de 2.0% en 2017, como ya publicó en Julio de 2016, superando así a la mayoría de las principales economías europeas.
Respaldado por el crecimiento económico, Moody’s espera que la calidad de los activos de los bancos españoles continúe mejorando durante los próximos 12 a 18 meses, y que el todavía elevado volumen de príéstamos dudosos siga disminuyendo de forma gradual. Moody’s tambiíén espera que el volumen de inmuebles adjudicados, que se ha venido incrementado gradualmente desde 2009, comience a reducirse, aunque a tasas muy modestas, dado el comportamiento más favorable del mercado inmobiliario.