"Con la adquisición de Fenosa, cerramos nuestro capítulo de compras y fusiones"
Publicado en Expansión por Jesús Martínez de Rioja
El consejero delegado de Gas Natural tiene 57 años y dirige la gestión de Gas Natural desde el mes de enero de 2005. Gas Natural protagoniza en estos momentos una de las grandes operaciones en el sector energíético español con la compra de Unión Fenosa.
Pregunta: ¿Cómo va la operación de compra de Unión Fenosa? ¿Sigue los pasos previstos o está encontrando dificultades debido a esta crisis financiera que nos ataca?
Respuesta: Pues sigue los pasos previstos. Ya cuando la lanzamos, y comentamos al mercado a finales del pasado mes de julio, ya anticipamos el calendario, que se está cumpliendo. De hecho, anticipamos que seguramente en el mes de marzo y abril se culminaría la liquidación de la opa que pondrá punto final a la compra de Unión Fenosa y, tal como van las cosas, estamos anticipando que probablemente en un mes pueda finalizar la opa despuíés de los procesos de competencia.
Por lo tanto, va con normalidad, dentro de que estos procesos son realmente largos y toman su tiempo. Y, efectivamente, la crisis que nos envuelve, sin duda alguna, afecta a toda actividad económica y, por supuesto, a una operación de esta envergadura. Sin embargo, la operación está ya encaminada adecuadamente y no esperamos más sorpresas que las lógicas que nos deparen los trámites administrativos aún pendientes.
P: ¿Y tienen ustedes miedo a que la Comisión Nacional de la Energía les ponga alguna pega a la operación, ponga alguna condición importante a la operación?.
R: Pues miedo no. Estamos convencidos de que íésta es una operación que, en tíérminos generales, no tiene ningún problema anticompetitivo, sino más bien pro-competitivo en el mundo de la electricidad. Conseguirá que exista un tercer operador con capacidad, recursos y volumen suficientes para competir con los dos líderes del sector.
Y en el mundo del gas, en cualquier caso, el mercado español ya es un mercado abierto absolutamente, donde los grandes operadores internacionales, tanto las grandes compañías multinacionales como los operadores estatales que tienen hidrocarburos, actúan con total libertad en el mercado español. Por lo tanto, es evidente que ni en el mundo del gas ni en el de la electricidad nuestra operación pondrá trabas a la competencia, sino más bien seguro lo contrario.
"Será necesario, sin duda alguna, abrir el debate de la energía nuclear en España"
P: ¿Y Gas Natural tiene los recursos necesarios y suficientes para acometer la operación? Porque en algún momento, en estas últimas semanas, se ha hablado que, debido a los problemas del mercado financiero internacional, Gas Natural podría tener alguna dificultad para conseguir la financiación necesaria para comprar Unión Fenosa.
R: Afortunadamente, no es ese el caso. A finales del mes de julio, despuíés de haber lanzado la operación, cerramos con un consorcio de diez bancos el aseguramiento de toda la operación. Esto quiere decir que es una operación definida y concreta, no sujeta a cláusulas que puedan significar en algún momento que la cifra no sea cierta y segura. Ya, de hecho, los fondos, 18.500 millones de euros, están a nuestra disposición.
Simplemente, es que no ha llegado el momento aún de proceder al pago, no tenemos aún las autorizaciones para proceder a la compra de la compañía y, por lo tanto, estamos a la espera. Sin embargo, tenemos resuelta la financiación, está asegurada; queda, naturalmente, la sindicación, que deben hacer los bancos que la aseguran. Evidentemente, las circunstancias actuales no son las que imperaban en el mercado en julio o en agosto del corriente año, pero eso es una cuestión; otra cuestión es que la financiación, los tíérminos y los costes en los que tiene que desenvolverse están perfectamente definidos y es una cuestión que en estos momentos no nos preocupa.
P: ¿Y que supone para el sector energíético español la constitución de este nuevo gran grupo?
R: Estamos convencidos de que es una operación importante. Por supuesto, lo es para Gas Natural, pero tambiíén para el sector energíético. España tenía y tiene importantes compañías, pero creemos que el tamaño, la consolidación, es un factor que sin duda va a aportar mucho a las empresas, al sector y a los consumidores. En concreto, para nosotros significa que con nuestra operación con Unión Fenosa vamos a doblar tamaño.
"La unión Gas Natural-Fenosa no atenta contra la competencia, si no que la favorece"
Doblar tamaño nos va a acercar a los dos grandes líderes en el mundo de la electricidad, tanto en potencia instalada como en número de clientes. No superaremos, pero nos acercaremos a los dos grandes líderes del sector y la competencia sin duda alguna mejorará y nuestra capacidad para crecer en el sector de la energía, en el sector elíéctrico, será efectiva. Sólo limitados a la electricidad generada por Gas Natural tenemos realmente unos evidentes techos.
En el mundo del gas sucede lo mismo. El mundo del gas es un mundo ya plenamente liberalizado. El mundo de los hidrocarburos es un mundo globalizado ya. Y en ese mundo, el tamaño, la potencia, la capacidad de negociación con los países productores de gas, con los países que realmente tienen compañías nacionales que lo comercializan y con las grandes multinacionales que operan ya con toda libertad en España, sin duda alguna va a ser un valor muy apreciable.
P: Tambiíén se ha comentado y hemos podido leer estos días que la Comisión Nacional de la Energía calcula que se necesitaría un aumento de las tarifas elíéctricas del 30% para cubrir o eliminar el denominado díéficit de tarifa que es la diferencia entre lo que le cuesta a las elíéctricas generar la energía y lo que cobran por ella. Gas Natural no tenía experiencia hasta ahora en este tipo de mecanismos, en este tipo de contenciosos. ¿Quíé opinión le merece esta sugerencia de la Comisión Nacional de la Energía ahora que usted va a ser gestor de una compañía que va a tener una parte muy importante de consumidores de electricidad?
R: El tema del díéficit de tarifa es de extraordinaria relevancia, probablemente el más importante que tiene el sector en estos momentos, y que arrastra a muchos otros. Gas Natural no estaba afectado por el mecanismo de díéficit de tarifa pero lo padecía. Gas Natural no podía comercializar en los tramos que juega el díéficit de tarifa por cuanto no teníamos acceso a esta financiación a largo plazo que disponen las elíéctricas incumbentes cuando venden electricidad por el mecanismo de venderla por debajo de coste y generar un díéficit. Ese es un problema muy serio. Para este año estaba previsto que el díéficit sería de 4.750 millones de euros; los últimos cálculos es de que puede no estar muy lejos de 7.000 millones. Son cifras que al sumarse las ya acumuladas acabaremos el año superando los 15.000 millones de euros de díéficit.
"La operación sigue los pasos previstos y no hay problemas de financiación"
La cifra es impresionante y no puede continuar creciendo. Afecta a la estructura del sector. Afecta a un montón de cosas. Estoy convencido de que el Ministerio, al igual que todas las empresas que estamos, o vamos a estar en el sistema, tenemos todo el interíés en que finalice esta situación, que distorsiona la competencia y que, además, provoca incertidumbres en cuanto a la capacidad que tendrá el sector para aceptar sus retos.
Indudablemente, coinciden en el díéficit de tarifa varias cuestiones. Una de ellas sin duda alguna es el coste de la energía; el coste de la electricidad en España es sustantivamente más barato que en la mayoría de los países de Europa. í‰ste es un factor que no debemos olvidar.
Confluye tambiíén en este problema la política de renovables; es clara y evidente la necesidad de promocionarlas, pero no podemos olvidar que las energías renovables son mucho más caras que las convencionales, por lo tanto si las queremos tendremos que pagarlas.
Y tambiíén otra serie de factores que están incluidos en el llamado díéficit de tarifa que hacen que este año llegue a estas cifras tan deproporcionadas. En Gas Natural, estamos preocupados, pero estamos convencidos de que el Ministerio lo tiene como una de sus mayores prioridades y que seguro debemos encontrar el camino para resolver esta cuestión.
P: Pero por quíé existe ese prejuicio a que cuando suben los precios del petróleo, sí sube inmediatamente o casi inmediatamente el precio de la gasolina, es más difícil que baje con la misma velocidad si baja el precio del petróleo. En cambio, en los precios de la energía elíéctrica este mecanismo de repercusión casi inmediato no se produce. ¿Por quíé cree usted?
R: Porque el sector elíéctrico español no está liberalizado, a diferencia por ejemplo del sector del gas. Ya en 2007 prácticamente el 90% de las transacciones gasistas estuvieron en el mercado liberalizado, sólo un 10% regulado. En cambio, no fue así en el mercado elíéctrico, donde el año pasado el mercado liberalizado no alcanzó el 30%; este año llegará a más del 40%. El mercado elíéctrico no está liberalizado.
"Nos va a acercar a los dos grandes líderes en el mundo de la electricidad"
Es verdad que la adaptación a España de las directivas europeas nos va a obligar a hacerlo ya en un plazo relativamente breve, probablemente con seguridad el año que viene, y esto obligará a tener que abordar el mecanismo del díéficit de tarifa. Es cierto que todos los gobiernos han tenido una enorme resistencia a trasladar los costes reales de la energía a los consumidores y han producido esta diferencia, que es una diferencia que no nos debe llamar a engaño.
No es que la energía en España sea más barata, es que la energía en España una parte relevante la pagamos en quince años con intereses, pero la pagamos los consumidores. Y eso ha sido debido a que el mecanismo de formación de precios en España acusa los precios de la gasolina, del petróleo en el mundo, y además acusa tambiíén la crisis energíética en el sentido del desequilibrio de la demanda haciendo que los precios crezcan.
Por diversas razones, entre otras tambiíén el apoyo a las energías renovables, la cifra de díéficit en los últimos tres años se ha disparado y la dificultad en trasladarla se ha hecho más evidente. Va a ser difícil poder continuar con la misma política, porque las cifras comienzan a ser difíciles de digerir.
P: Y cuál alternativa se presenta a esa situación, porque hemos visto que en Europa, en lugar de pensar en las energías renovables como una apuesta a medio y largo plazo, están desarrollando algunos países importantes programas de construcción de centrales nucleares precisamente para vencer la dependencia energíética exterior. España es un país con una alta dependencia energíética exterior. ¿Es usted partidario de poner en marcha nuevas centrales nucleares, de prolongar la vida de las ya existentes, ahora que además Unión Fenosa tenía participaciones importantes en algunas de ellas? ¿Quíé opina usted de este tema?
R: Será necesario, sin duda alguna, abrir el debate de la energía nuclear. Soy de los que opina que a priori no puede prescindirse de ninguna energía. Por supuesto, las renovables en absoluto, hay que apoyarlas. Cuestión distinta es en dónde debemos hacer el apoyo, si a travíés de una política de subvenciones que cargue las tarifas de los consumidores o a travíés de otras. Eso es otra cuestión, pero queda claro que las energías renovables merecen ser apoyadas.
La energía nuclear merece tambiíén, sin duda alguna, abrir el debate, como se ha hecho en otros países europeos, y yo creo que debe abrirse en un doble sentido. No sólo en cuanto a los posibles impactos medioambientales, un debate interesante y sin duda alguna trascendente, sino tambiíén en el tema económico. Habrá que ver en quíé entorno y en quíé condiciones se vuelven a lanzar en algunos países nuevos planes de centrales nucleares.
"Cuando termine todo, habremos conseguido duplicar nuestro tamaño"
De hecho, en Europa proyectos hay alguno, realidades sólo una, en Finlandia, con una evolución económica realmente fuera de presupuestos. Va a ser necesario llevar a cabo una profunda reflexión. Y quizá el marco europeo, el marco comunitario, sea el adecuado para tratar esta cuestión.