Reuters
Las autoridades de la Reserva Federal podrían subir pronto la tasa de interíés de referencia de Estados Unidos, mientras que banqueros centrales prevíén que la decisión podría tomarse el próximo mes si la economía va bien.
Las autoridades de la Reserva Federal están avisando que podrían subir pronto la tasa de interíés de referencia de Estados Unidos, pero tambiíén están considerando las nuevas herramientas que podrían necesitar para enfrentar una próxima recesión.
La solidez del mercado laboral en Estados Unidos "ha fortalecido" los argumentos para la primera alza de tasas de interíés desde diciembre, dijo la presidenta de la Fed, Janet Yellen, a una audiencia de banqueros centrales en Jackson Hole, en el estado de Wyoming. Y varios de sus colegas dijeron que la decisión podría tomarse incluso el próximo mes si la economía va bien.
Se espera que las alzas de tasas sean menos y más distanciadas porque el banco central estadounidense está intentando que su deseo de estimular el crecimiento no genere un sobrecalentamiento de la economía
No obstante, los funcionarios de la Fed dijeron, en la conferencia de tres días que terminó el sábado, que tambiíén necesitan considerar nuevas herramientas de política monetaria, como subir los objetivos de inflación o incluso la compra de activos no gubernamentales, como la deuda de empresas.
Algunas de las ideas probarán los límites de la viabilidad política y otras necesitan la aprobación del Congreso. La percepción en la Fed es que se necesitaría trabajo para convencer a un público ya escíéptico tras las políticas no convencionales que el banco usó durante la más reciente crisis.
Los responsables de la política monetaria creen que las nuevas herramientas pueden ser necesarias en una íépoca de un crecimiento económico más lento y de una enorme cantidad de activos atesorados por la Fed. Y consideran que el momento para una revisión es ahora, cuando las tasas se aprestan a subir.
"La actividad de banca central está entrando en un mundo nuevo y desafiante", dijo el presidente de la Fed de Atlanta, Dennis Lockhart, en una entrevista durante la reunión.
En el meollo del debate están los 4.5 billones de dólares del balance del banco central, que se multiplicó con las compras de bonos para combatir la recesión de 2007 a 2009 y que muchos legisladores han criticado.
Si bien congresistas han argumentado que la Fed debería eventualmente reducir sus inversiones en bonos, Lockhart dijo que algunos de los funcionarios están por asumir la necesidad de vivir con ellos.
"Sospecho que hay colegas que consideran que al menos el enorme balance debería mantenerse estático como un hecho de la causa y una herramienta para el banco central", dijo.
Funcionarios han dicho que dejarán que el balance se reduzca lentamente, un proceso que puede tomar años y que no comenzaría hasta que el proceso de alzas de tasas estíé bien encaminado. Un avance sustancial sólo podría lograrse durante una expansión económica muy larga.
"Estoy seguro que todos en la audiencia estaríamos muy felices si esto fuera una realidad. Yo ciertamente lo estaría", dijo en la conferencia Simon Potter, jefe de mercados de la Fed de Nueva York.
Yellen, en su discurso del viernes, dijo que el balance probablemente crecerá nuevamente en futuras recesiones, cuando la Fed demande activos para estimular a la economía.
NUEVA IDEAS
La conferencia, a la que asistieron todos menos dos de los 17 gobernadores de la Fed, y banqueros centrales de todo el mundo, tambiíén abordó un menú de propuestas más exóticas, que incluyeron que la Fed tome el control de los mercados de deuda de corto plazo y abolir el efectivo para permitir las tasas de interíés negativas.
Muchas de las propuestas radicales, incluyendo una para abandonar la política monetaria del todo y enfocarse en el díéficit fiscal, fueron vistas como discusiones en abstracto.
La mayoría de los funcionarios, incluyendo a Yellen, dijeron que es probable que la Fed vaya a usar las herramientas a las que echó mano en la última crisis, como la compra de bonos y manejo de las expectativas de tasas.
Aun así, dijo, "los futuros responsables de la política monetaria podrían considerar el uso de herramientas adicionales que han empleado otros bancos centrales", incluida la compra de una mayor variedad de activos y subir los objetivos de inflación. Además, mencionó la posibilidad de apuntar a un nivel de precios más que a la variación de estos.
Pero su lista de posibles herramientas notablemente no incluyó las tasas de interíés negativas, una idea que ha sido discutida ampliamente por los funcionarios del banco. Yellen dijo que la Fed no está considerando activamente más herramientas de política monetaria, pero quienes participaron en la conferencia sugirieron que el proceso está en marcha.
"Ya estamos viendo una exploración de cómo vamos a operar en un mundo bastante diferente al de antes de la crisis", dijo Lockhart.