EUROPA PRESS
Una de las amenazas más importantes a las que se enfrentan las compañías y los usuarios particulares son los troyanos, un tipo de programa malicioso diseñado para robar información o hacerse con el control remoto de los ordenadores y terminales móviles.
Este tipo de 'malware' toma su nombre del caballo de Troya, porque se disfraza de algo inofensivo y crea una puerta trasera que permite dar el control remoto del equipo a un usuario no autorizado, como explican desde Panda Security.
Por su carácter aparentemente inofensivo, se ha convertido en una de las ciberamenazas más populares, es más, los troyanos se encuentran en el primero puesto de las 227.000 muestras de malware que se detectan cada día.
Los troyanos se disfrazan de supuestos premios que se han ganado -sin participar-, de ofertas o descuentes irresistibles que se comparten por redes sociales o por webs poco seguras.
Una vez infectado el equipo, los troyanos comprometen sigilosamente la información que contenga el usuario. Pueden hacer uso de la webcam sin permiso, borrar el disco, modificar la agenda de contactos, efectuar llamadas y enviar SMS y hasta geolocalizar al usuario por GPS.
¿Cómo protegerse? Desde el estudio de seguridad aconsejan evitar descargar contenidos desde páginas desconocidas o de dudosa reputación, así como vigilar las descargas realizadas desde aplicaciones P2P, así como tener instalada una solución de seguridad.