"Estamos mejor que los demás"
Publicado en Expansión por Itziar Elizalde
El ejecutivo y primer accionista de Pescanova destaca que el grupo ha financiado sus proyectos estratíégicos, a pesar de la difícil situación en los mercados de críédito.
Manuel Fernández de Sousa, presidente del Grupo Pescanova, acaba de ver cumplido uno de sus objetivos estratíégicos: cerrar el ciclo completo del cultivo de langostino en Nicaragua, país donde el pasado 1 de octubre inauguró la mayor planta de procesado de este producto de Occidente. Desde 2004, el grupo español ha invertido en el país 45 millones de euros. Ahora contará con una capacidad de producción de 30.000 toneladas íntegramente controladas por la compañía.
Su apuesta por el pollo del mar, como Manuel Fernández de Sousa define al langostino de cultivo, incluye otros proyectos en Honduras, Guatemala y Ecuador, donde su fábrica se ha convertido en el primer exportador del país.
"Los accionistas de Pescanova creemos que la acción vale más que su precio en bolsa actual"
Una vez que Nicaragua alcance el próximo año su velocidad de crucero, el grupo centrará su esfuerzo inversor en estos países. Por ejemplo, en Honduras, no se descarta duplicar la superficie de cultivo «si se presentara una oportunidad razonable», mientras que en Ecuador se tratará de mejorar la fábrica.
Con estas iniciativas, el Grupo Pescanova espera alcanzar unas ventas de langostino próximas a las 60.000 toneladas en 2009, volumen que le situará como líder mundial en comercialización de esta especie, superando a la tailandesa CP. Sus principales mercados son España, Francia, Italia, Portugal y Estados Unidos.
Acuicultura
El esfuerzo por ser un referente mundial en el langostino, responde a la firme creencia de que este producto será una de las especies de pescado más consumidas, al igual que el rodaballo o la tilapia. En todas ellas, Pescanova ha apostado por la acuicultura. Antes de fin de año, Manuel Fernández de Sousa espera inaugurar la nueva planta de Mira (Portugal), que, con una inversión de 135 millones de euros, se convertirá en el mayor centro de procesado de rodaballo del mundo. En 2009, aportará 7.000 toneladas y superará a la planta gallega en Xove, que mueve 3.000 toneladas.
De esta manera, el próximo año, la compañía obtendrá 90.000 toneladas de producto a travíés del cultivo marino, mientras que la pesca extractiva aportará 120.000 toneladas. En dos años, la radiografía de las materias primas será diferente: la producción acuícola superará a la obtenida de la pesca.
«La falta de liquidez es un problema general para las empresas», asegura Manuel Fernández de Sousa, quien destaca que los planes estratíégicos de la compañía no se han visto afectados por las turbulencias en los mercados financieros.
«La deuda para los proyectos estratíégicos más importantes [en alusión a la reciente inversión en Portugal], la hemos colocado sin dificultad entre los bancos», afirma el ejecutivo. «En condiciones normales no nos debe afectar. Estamos mejor posicionados que los demás», apostilla Fernández de Sousa. La compañía cerró su último ejercicio con una deuda financiera a largo plazo de 432 millones de euros, frente a los 377 millones de 2006.
Aunque la compañía está cumpliendo paso a paso y sin salirse del guión su plan estratíégico, la cotización en bolsa no acompaña. «La bolsa no premia nuestros avances en el plan de negocio, aunque, en parte es comprensible, porque el valor tiene poco free-flow (capital que circula libremente en bolsa)», reconoce el primer ejecutivo. En su opinión, la cotización de Pescanova seguirá un comportamiento paralelo al Ibex 35. Pescanova cerró ayer en 26,1 euros, lo que supone un retroceso del 35,49% desde principios de año. En este tiempo, el índice selectivo ha retrocedido un 47,48%.
De momento, no hay planes de incrementar el capital flotante. «Todos los accionistas pensamos que la acción vale más que su cotización actual», subraya Manuel Fernández de Sousa, que añade «no tiene sentido hacer una ampliación de capital y venderla barato». El presidente es el primer accionista con un 24,156% del capital.
Consumo
«La crisis de consumo en España se nota en que los consumidores gastan menos dinero», reconoce el ejecutivo, que detalla que están creciendo los productos de menor margen. No obstante, la empresa prevíé mantener su facturación o, incluso, aumentarla este ejercicio, pues las ventas de producto de menor margen se están compensado con una mayor comercialización en volumen.
Al ritmo del sector cárnico
Las acciones de Pescanova tienen un comportamiento de valor refugio y cierta estabilidad. Los altibajos en su cotización han surgido a raíz de los problemas alimentarios relacionados con el sector cárnico, especialmente con el mal de las ‘vacas locas’ y la ‘gripe aviar’. El primer ‘boom’ se vivió a finales de enero de 2001, cuando la encefalopatía espongiforme bovina, conocida popularmente como el mal de las vacas locas, disparó un 66% su cotización, hasta los 14,95 euros.
Cuatro años despuíés, el temor despertado por la gripe aviar animó la revalorización de los títulos del gigante pesquero gallego, que batió un ríécord histórico en febrero de 2006 al alcanzar los 27,50 euros por título. Un año despuíés, los nuevos casos de gripe aviar en Reino Unido volvieron a disparar su cotización hasta superar los 33 euros. Por regla general, tras estas alegrías de marcado carácter especulativo, el valor tiende a corregirse.
