https://ecoosfera.com/crecer-nuevas-neuronas-neurogenesis-cerebro/Un proceso como la neurogénesis puede ayudarte a recuperar neuronas, pero no es automático: depende de ti desarrollarlo.
Nuestro cuerpo y mente son esencialmente resilientes: tienen procesos intermitentes que van de la muerte a la vida y de regreso, manteniendo un equilibrio orgánico. Mientras más avanza la ciencia más podemos saber al respecto, y más podemos convertirlo en un proceso benéfico para nosotros.
Lejos de ser automáticos, estos cambios responden también a estímulos externos que están relativamente bajo nuestro control. Y nuestro cerebro no es la excepción, pues es capaz de regenerar sus neuronas, tal como nuestra piel se regenera cada 2 semanas y nuestros huesos cada 2 años. Esta neurogénesis adulta es fundamental, ya que evita, entre otras cosas, las desestabilizaciones emocionales.
¿Qué parte de la neurogénesis podemos controlar?
como crecer nuevas neuronas cerebro humano slaud
Arte: Franz Falckenhaus
Nuestro cerebro es el órgano con el que experimentamos el mundo, y al cual llega toda la información del exterior. Si bien tiene sus ciclos internos autónomos, lo que experimente este órgano será clave en la manera como trabaje a lo largo de nuestra vida.
Una de las áreas más sensibles del cerebro es el hipotálamo, que es el encargado de regular el hambre, el sueño y las emociones a través de las hormonas. Además de la zona subventricular, el hipotálamo es el único generador de neuronas. Pero por sus funciones, la neurogénesis en esta zona dependerá mucho de cómo experimentemos la vida. Así lo demuestran los hipotálamos con poca neurogénesis, mismos que se encuentran en las personas con depresiones fuertes y crónicas, e incluso en pacientes de demencia.
El hipocampo genera 700 nuevas neuronas al día.
Por eso, la neurogénesis es un proceso que hasta cierto punto depende de nosotros. Como demostró un estudio hecho en ratones en la Universidad de Duke, tener algunas dosis diarias de silencio permite la regeneración de células que se convierten en neuronas funcionales. El investigador encargado del estudio, Imke Kirste, resalta que esto podría hacer del silencio toda una terapia, sobre todo porque se ha demostrado que el silencio también estimula la neurogénesis en los seres humanos.
Hábitos cotidianos para promover la neurogénesis
Como puede verse, es fundamental saber que, en el caso de condiciones como la depresión, no todo está en tomar antidepresivos. El proceso por el cual la mente se enferma es mucho más complejo y tiene que ver precisamente con la falta de neuronas, así que unas pocas pueden hacer toda la diferencia. Y nosotros podemos decidir matarlas o promover su creación.
Además de algunas dosis diarias de silencio, estos son algunos hábitos que puedes realizar cotidianamente para promover la neurogénesis:
Mantén tu mente activa
Una función fundamental del cerebro la de aprender. Para el cerebro, estudiar es como ir al gimnasio y mantener sus músculos en forma. Por eso es fundamental que estudiemos nuestros temas de interés con disciplina y empeño. Así cuidaremos también de nuestra memoria.
Corre
En un estudio se comprobó que correr generaba nuevas neuronas en ratones adultos. Es indudable que el ejercicio es un gran momento para conectar mente y cuerpo, algo esencial que debemos hacer para promover una correcta comunicación entre ambos.
Retoma el diálogo con tu alimentación
Al estar ligada al metabolismo y otros procesos cerebrales y corporales, la alimentación nos afecta también a niveles anímicos. Es bueno reducir la ingesta de calorías, como recomienda la OMS, pues se ha comprobado que una dieta hipocalórica puede ayudar a mejorar los estados de humor y el sueño. Además, los ayunos intermitentes ayudan a la supervivencia de las células, que es tan importante como la génesis de las mismas.
Medita
La meditación mindfulness es un momento de silenciosa reconexión que es benéfica a un nivel orgánico, pues beneficia cuerpo y mente y es capaz de equilibrarnos emocionalmente. Además nos libera del estrés, que inhibe la proliferación celular.
Por eso, también debes tener mucho sexo
El sexo es una manera única de disminuir el estrés y la ansiedad, lo que también promueve la neurogénesis, que además será mutua… ¿y qué mejor que eso?