Por... Marcus Ashworth
Las acciones estadounidenses han superado a sus pares europeas en los últimos 15 años. Eso no significa que sea hora de cambiar.
Los inversores han ganado alrededor del 10% de las acciones estadounidenses este año, el doble de lo que está disponible en Europa. Eso es en términos de rendimiento total en dólares, pero el panorama es más o menos el mismo ya sea en euros o cuando se mide en monedas locales. En un horizonte de 15 años, la división es aún más extrema: el dinero invertido en el índice de referencia estadounidense se quintuplica frente a menos del doble en Europa.
Los inversores han ganado alrededor del 10% de las acciones estadounidenses este año, el doble de lo que está disponible en Europa. Eso es en términos de rendimiento total en dólares, pero el panorama es más o menos el mismo ya sea en euros o cuando se mide en monedas locales. En un horizonte de 15 años, la división es aún más extrema: el dinero invertido en el índice de referencia estadounidense se quintuplica frente a menos del doble en Europa.
15 años de bajo rendimiento
Las acciones europeas han generado rendimientos más bajos que sus pares estadounidenses durante la última década y media
Aún así, el S&P 500 ha tenido un año mixto. Si bien el índice de referencia ha subido casi un 9%, estaría en territorio negativo si no fuera por las acciones tecnológicas de los Siete Magníficos. El índice Nasdaq, de gran tecnología, ha subido un 23%, pero el índice Russell 2000 de mediana capitalización ha bajado un 5,6%. La selección de sectores es evidentemente la habilidad más valiosa para un gestor de cartera.