SERES MITOLÓGICOS GALLEGOS: EL TRASNO
https://misteriosleyendasdegaliciayasturias.wordpress.com/2017/10/11/seres-mitologicos-gallegos-el-trasno/?fbclid=IwAR2j9FutssGK3MEuzzlC_grhle5DdBymzDB25b-i9op9JicQmTL0i-n7-2wUn Trasno es una criatura mitológica tradicional gallega. Se le describe como una especie de duende al que le gusta hacer travesuras y pequeñas maldades. En ocasiones tambien se le describe como un diablillo, entendido como ente distinto del Demonio, aunque nunca es tan maligno como éste.
EL AUTOR: ANTONIO CENIZA
©CENIZA777
Según la tradición habita en los bosques más frondosos o en las cunetas de los caminos esperando que pase alguien para desvalijarlo. Suele ser de hábitos nocturnos, actuando siempre a la luz de la luna, y sirve para explicar sucesos de causa aparentemente desconocida, sobre todo sucesos accidentales que comportan un daño poco grave. Así, el Trasno trama para hacer que se rompa la vajilla, que se pierdan las llaves, que caiga un vallado, que se líen los novillos que esté cosiendo una muchacha, etc… Pero el Trasno también puede andar detrás de una persona y seguirla a todas partes. Algunas veces toma forma animal (como un caballo, un perro abandonado, etc…) y es mencionable su asombrosa facultad para esconderse en cualquier momento y lugar.
De acuerdo con la cultura popular, existe un truco muy eficaz para liberarse del Trasno. Consiste en dejarle en un plato o, mejor, ciscado no chan (esparcido por el suelo), una buena presa de lentejas, habas, granos de maíz o algo semejante. Como el Trasno no sabe contar más de cien, cuando llega a esta cifra tiene que empezar de nuevo, y así se le mantiene ocupado sin que siga haciendo de las suyas.
Aunque no es tan malevolo, dada su personalidad, suele ser confundido con el tardo.
Los Trasnos son un tipo de duende nocturno perteneciente a la mitología gallega. Son seres traviesos que durante las noches, cuando todos los miembros de la familia se han acostado, se dedican a revolver todos los utensilios de cocina y a esconder cosas. Se le describe de tantas formas como nombres recibe. Las que más se repiten lo describen como un hombre pequeño, vestido con sotana y cuernos, con barba larga y gorro rojo. Una de sus peculiaridades, e importante para “acabar” con ellos y sus travesuras, es que tienen un agujero en la mano izquierda. En el Diccionario dos seres míticos galegos se le describe también con piernas de cabra, con rabo y un solo cuerno o con forma de oveja, de carnero e incluso de cerdo. Esta última descripción acerca a los trasnos a los Sátiros de la mitología clásica, de hecho de todos los tipos de duendes que hay en Galicia, se recogieron historias que los describen con patas de cabra.
En las antiguas creencias de Galicia, al Trasno se lo describía como un espíritu nocturno o un demonio menor que solía vivir en las herrerías y en las fraguas, pero sobre todo en las casas; hasta el punto de que cuando una familia se mudaba, éste se escondía entre sus pertenencias y se iba con ellos.
Risco publicó una historia sobre una mujer que se mudaba y su Trasno:
“- ¡Me voy por el Trasno! ¡Se me pegó de mala manera y no me deja!
El vecino giró la cabeza para indagar, pues era escéptico. Encima del sarillo (devanadera) iba el armadanzas muy acomodado:
– ¡Vamos de casa mudada! – dijo, y sonrió cínico, como le daba la gana.”
Tanto los Trasnos como los tardos, son seres domésticos, y de hecho, el nombre vasco para ellos etxajaun significa “señor de la casa”.
¿CÓMO LUCHAR CONTRA LAS TRASNADAS?
En Galicia en vez de decir trastadas se dice trasnadas
Para saber que tenemos un trasno en casa basta con observar a los animales que tengamos. Cuando éstos se ponen nerviosos o se asustan sin razón, se escuchan ruidos extraños, se cierran puertas o ventanas solas, si llevas cargado algo a la espalda y empieza a pesar más de repente o, por ejemplo, si notas que alguien te da un azote en el trasero y no ves a nadie.
El truco más eficaz contra los Trasnos es dejar un recipiente con granos de algún cereal cerca de donde dormimos o esparcir los granos por el suelo. Los trasnos tienen la obsesión de ordenar las cosas que ven desordenadas, ¡aunque luego sean ellos los primeros en ponerte la casa patas arriba!, y como no son muy listos, no saben contar hasta más de diez entonces cuando llegan a ese número se pierden y tienen que volver a empezar. En las leyendas que se afirma que los trasnos tienen un agujero en la mano izquierda, éstos se caen por el agujero y así conseguimos que estén entretenidos toda la noche y no hagan trasnadas.
También se puede espantar encendiendo la luz, bendecir la casa, meter dentro un cuerno de castrón: hierba de roble y cachos de evangelios cerrando bien el cuerno con un pellejo del mismo carnero.
Otra forma para librarse de ellos, al igual que los elfos domésticos, es regalándoles ropa porque sienten que es una ofensa y así abandona tu casa.
Los Trasnos, ayudan con las tareas domésticas, y para echarlos recomiendan que les mandes hacer una tarea imposible para que se frustren y se vayan.
EL TRASNO Y SUS EQUIVALENTES EN OTRAS PARTES DEL MUNDO
En Galicia se han recogido numerosas formas de llamarlo: proviso, perete, perello, perecho… casi tantas como aspectos se dice que tiene.
La figura del Trasno es un ser universal ya que es el mismo personaje que el duende de Castilla, el trasgu de Asturias, el Follet en Cataluña, el lutin de Francia, el puck de Inglaterra, phouka o pooka en Irlanda o el Puck o Hobglobin de Inglaterra que os comentábamos anteriormente. También hay constancia de este personaje en Alemania, Noruega, Finlandia, Holanda, Portugal, Cornualles, Suecia…