Tokio
El ministro chino de Relaciones Exteriores, Wang Yi, denunció que Estados Unidos es el principal elemento desestabilizador del mundo con sus políticas proteccionistas y unilaterales usadas para frenar el libre comercio y el desarrollo de otras naciones.
Desde la reunión de cancilleres del G2 en Nagoya, el alto diplomático ilustró su planteamiento con el acoso de Washington a empresas de su país, el levantamiento de barreras a las operaciones en mercados internacionales y el señalamiento con acusaciones sin fundamento.
Fustigó la intromisión de políticos norteamericanos en asuntos internos de China como Hong Kong con los propósitos de dañar el principio de Un país, dos sistemas, y obstruir el desarrollo nacional, lo cual -aseguró- está condenado al fracaso.
Por otro lado, Wang llamó a promover más la apertura, integración, las inversiones facilidades mercantiles y la reforma de la Organización Mundial del Comercio para mantener un sistema multilateral basado en reglas.
Consideró imperativo construir un entorno no discriminatorio y con tratamiento diferenciado para países en vías de desarrollo como los de África, que necesitan apoyo frente a problemas de infraestructura, presupuesto, talento, seguridad alimentaria y bienestar social.
También planteó dar pasos concretos ante los crecientes desafíos e incertidumbres que empujan al retroceso de la economía global.
Wang Yi expresó la disposición de China a compartir sus experiencias en aspectos como la reducción de pobreza y a abrir más las puertas de su mercado mediante iniciativas como la iniciativa como la Feria Internacional de Importaciones e Importaciones, cuya segunda edición arrojó negocios por más de 71 mil millones de dólares.
Asimismo, remarcó el apoyo de Beijing al Acuerdo Climático de París, firmado en 2015.
Aparte de intervenir en la cita de cancilleres del G20, el titular chino sostuvo encuentros bilaterales con su homólogo de Países Bajos, Stef Blok, y el gobernador de la prefectura japonesa de Aichi, Hideaki Ohmura.
