Durante una reunión ayer en la Casa Blanca con nueve honchos de la industria petrolera, el presidente Trump prometió que el gobierno ayudaría a revivir el sector en conflicto a la luz de la presión de los precios de COVID-19, un 50% desde el comienzo de la pandemia, aunque Dijo que las compañías no pidieron un rescate.
Arabia Saudita y Rusia están instando a Estados Unidos a coordinar los recortes de producción para estabilizar los precios, pero muchos grandes productores estadounidenses, incluidos Exxon Mobil (NYSE: XOM ) y Chevron (NYSE: CVX ), se oponen a cualquier intervención. Sin embargo, los perforadores de lutitas más pequeños quieren que los federales intervengan agresivamente, incluidos Pioneer Natural Resources (NYSE: PXD ) y Continental Resources (NYSE: CLR ).
El presidente dijo que no está considerando aranceles sobre el petróleo saudí en este momento.
En otra nota, Trump nominó al abogado de la Casa Blanca, Brian Miller, como inspector general especial para la recuperación de la pandemia, donde supervisará cómo se gastan los $ 500 millones destinados a préstamos comerciales.
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