Los Sonidos curativos
Los seis sonidos curativos nos ayudan a limpiar todas las toxinas y el estríés acumulados en la membrana que los rodea y nos ayudan a potenciar las buenas vibraciones de los órganos reforzando las energías positivas.
Curan los órganos al equilibrar sus funciones personales con el resto de sistema interno. Cada sonido puede realizarse desde cualquier posición pero hay que hacer los 6 sonidos seguidos y por el orden que exponemos. El detalle más importante es sentir cualquier energía negativas para poder transformarla en fuerza vital positiva.
Es Importante:
a) Repetir cada sonido 3, 6, 9, 12, 24, ó 36 veces, hasta notar que el aire que sale de nuestra boca al emitir el sonido es frío.
B) No olvidar despuíés de cada sonido respirar hacia el órgano y sonreírle, a fin de no dejarlo díébil.
C) Al principio, hasta sentirte seguro puedes emitir el sonido hacia el exterior, pero es aconsejable que envíes el sonido al órgano (sin voz), a fin de que este reciba el máximo de energía curativa.
Empezamos.
Ojos semicerrados o cerrados y la atención puesta en el órgano.