La situación más crítica para la Bolsa española ha pasado, aunque el Ibex sigue siendo incapaz de asentarse sobre los 7.000 puntos. El estallido de la pandemia en marzo hizo trizas las capitalizaciones bursátiles y, a día de hoy, el selectivo español todavía sufre una pérdida en lo que va de año del 27%, con diferencia la más acusada de Europa. La cantidad de valores que en los últimos meses han marcado mínimos históricos da sin duda una idea clara de los estragos en Bolsa del coronavirus. Así, un tercio del mercado continuo ha descendido a niveles sin precedentes en algún momento desde marzo.
Los grandes derrumbes se dieron en aquel mes aunque también hay valores que ahondaron su descenso en los meses siguientes y otros tantos que aún cotizan muy cerca de mínimos históricos. Es el caso de Vocento, que cotiza apenas un 2,86% por encima del mínimo histórico marcado este mes. También Bodegas Riojanas se mueve tan solo el 3,7% por encima del mínimo registrado el pasado agosto. Y varios grandes valores, como Telefónica, Santander y BBVA, si bien no han llegado a marcar mínimos históricos a causa de la pandemia, sí cotizan a los niveles más bajos en más de 20 años.
La mayoría de valores que han marcado mínimos históricos en esta crisis no pertenecen al Ibex. Y dentro del selectivo, y a pesar de los duros derrumbes, solo hay tres compañías que hayan caído a niveles sin precedentes, Merlin, Bankia y Sabadell. Estas dos últimas entidades financieras han logrado alejarse de esa zona de mínimos en los últimos días gracias a la expectativa de operaciones corporativas.
Entre las subidas desde mínimos, las mayores son sin embargo para Deoleo, Berkley y Duro Felguera, valores volátiles y en una continua montaña rusa.