Telefónica no quiere ceder terreno en ningún área de negocio. Por eso, ha relanzado su estrategia de fibra mayorista, sobre todo en el segmento empresarial e industrial. La competencia de Lyntia como operador neutro, y la fuerza de Red Eléctrica han forzado a la compañía azul a mostrarse más agresiva.
Según explican fuentes del sector a MERCA2, la compañía dirigida por José María Álvarez-Pallete pretende jugar un nuevo papel en el segmento de la fibra mayorista más allá del mercado residencial. Y es que según las últimas cifras de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), a cierre de 2019 el negocio de la fibra oscura movió en España 200 millones de euros. Un pastel que Telefónica no quiere dejar pasar.