Por... Silvia Amaro
Una investigación reveló en diciembre que los funcionarios fiscales acusaron erróneamente de fraude a miles de familias trabajadoras y les ordenaron reembolsar los beneficios de cuidado de niños entre 2013 y 2019.
El evento ha sido descrito como una “injusticia sin precedentes” por algunos legisladores holandeses.
LONDRES - Todo el gobierno holandés renunció colectivamente el viernes después de un escándalo que involucró la mala gestión de los fondos para el cuidado de los niños, que llevó a miles de familias a dificultades financieras.
Una investigación reveló en diciembre que los funcionarios fiscales acusaron erróneamente a miles de familias trabajadoras de fraude y les ordenaron reembolsar los beneficios de cuidado infantil entre 2013 y 2019. El evento ha sido descrito como una “injusticia sin precedentes” por algunos legisladores holandeses.
La revelación llevó a la renuncia el jueves del líder opositor Lodewijk Asscher, quien fue el ministro a cargo de asuntos sociales en la administración anterior.
El gobierno liderado por el primer ministro Mark Rutte, en el poder desde 2017, decidió el viernes aceptar la responsabilidad y dejar el cargo colectivamente a raíz del escándalo.
Rutte, hablando en una conferencia de prensa, dijo que continuaría liderando la respuesta de emergencia de Covid-19 con un estado de cuidador.