Por... Nick Carey
HEADLEY DOWN, Inglaterra (Reuters) - No hay nada como el rugido de un motor McLaren que acelera para hacer latir el pulso de un petrolhead, o el grito a todo trapo mientras atraviesa la pista.
Sin embargo, los nuevos motores de gasolina como el de McLaren podrían ser ilegales en muchos países para 2030. El fabricante de superdeportivos, como todos los fabricantes de automóviles, tiene que ser eléctrico, pero es más fácil decirlo que hacerlo para un jugador de nicho que no puede comprometer el rendimiento y las carreras. experiencia, que respalda su exclusividad y precios enrarecidos.
McLaren probablemente podría producir mañana un vehículo totalmente eléctrico, dijo Ruth Nic Aoidh, directora ejecutiva de compras del fabricante de automóviles británico. Pero el peso de las baterías de hoy "acabaría con todos los atributos que hacen de un McLaren un McLaren".
En cambio, Nic Aoidh dice que McLaren se está tomando más tiempo para repensar la forma en que construye vehículos desde las ruedas hacia arriba. También busca reformar su modelo de negocio para generar ingresos vendiendo parte de su nueva tecnología a otros fabricantes de automóviles
