BRUSELAS (AP) -
La Unión Europea se enfrentó al productor de vacunas AstraZeneca en un tribunal de Bruselas el miércoles con la exigencia urgente de que la compañía debe realizar una entrega inmediata de las inyecciones de COVID-19 que el bloque insiste en que ya estaban previstas.
El contrato de AstraZeneca firmado con la Comisión Europea, el brazo ejecutivo de la UE, en nombre de los estados miembros, preveía 300 millones de dosis iniciales para su distribución entre los 27 países, con una opción para otros 100 millones. Se esperaba que las dosis se entregaran a lo largo de 2021. Pero solo se enviaron 30 millones durante el primer trimestre.
Las entregas han aumentado ligeramente desde entonces, pero, según la Comisión Europea, la compañía está preparada para proporcionar solo 70 millones de dosis en el segundo trimestre. Había prometido 180 millones.
El abogado de la UE, Rafael Jafferali, dijo al tribunal que la compañía ahora espera entregar el número total de dosis para fines de diciembre, pero agregó que "con un retraso de seis meses, obviamente es un fracaso".
Su argumento principal es que AstraZeneca debería haber utilizado sitios de producción en el bloque y el Reino Unido para suministros de la UE como parte de una cláusula de "mejor esfuerzo razonable" en el contrato. Dijo que 50 millones de dosis que deberían haber sido entregadas a la UE se destinaron a en cambio, terceros países, "en violación" de su contrato.
Jafferali ha dicho que la empresa debería utilizar las cuatro plantas enumeradas en su contrato para las entregas a la UE.
También acusó a la empresa de engañar a la Comisión Europea al proporcionar datos que carecen de claridad sobre los retrasos en las entregas.
“La información proporcionada por AstraZeneca no nos permitió comprender completamente la situación antes de mediados de marzo de 2021”, dijo.
La UE ha insistido en que sus quejas con la empresa se refieren únicamente a las entregas y ha dicho repetidamente que no tiene problemas con la seguridad o la calidad de la vacuna en sí. Las inyecciones han sido aprobadas por la Agencia Europea de Medicamentos, el regulador de medicamentos de la UE.