Carla Bruni se debate entre sus funciones de primera dama y sus grabaciones en plató, la cultura, ser de izquierdas y estar casada con el Presidente de Francia.Por A.C Martín Los40.com Madrid (24/06/2008) --------------------------------------------------------------------------------"Mis reflejos epidíérmicos son de izquierdas. No es una ideología ni un sistema. No soy una militante, nunca lo he sido. Creo que las personas que están completamente de un lado o del otro no piensan con una parte de su cerebro" ha llegado a afirmar la primera dama francesa en declaraciones al diario 'Libíération'. Pero si su marido se volviese a presentar le votaría.La ex modelo y cantante Carla Bruni dice que su marido ha cambiado su estilo de vida y ha abandonado su gusto desmesurado por el lujo y que la derecha de Sarkozy este más cercana a la culturaCon respecto a su tercer disco, que será lanzado el 11 de julio. Algunas de las canciones las ha 'desarrollado' mientras estaba con el actual presidente de Francia pero sobre ideas que tenía anteriores a la relación.La primera dama no hará conciertos de promoción porque "entraña una estructura de seguridad que es chocante", pero cuando su esposo deje la presidencia ella volverá a los escenarios
Carla Bruni-Sarkozy sacará este viernes a la venta su tercer álbum, deseosa de mostrarse como una mujer independiente preocupada de conservar su trabajo como cantante.Por REUTERS Los40.com Madrid (10/07/2008) --------------------------------------------------------------------------------En una conversación difundida el miíércoles en la emisora France Inter, la primera dama francesa habla de su nueva vida tras su matrimonio en febrero con Nicolas Sarkozy, tras el cual la cantante estima no jugar ningún papel político. "Es un oficio como cualquier otro, es un oficio honesto y espero que los franceses no se molesten por que conserve un oficio. Estamos en 2008, y las mujeres, aunque se casen, y aunque lo hagan con alguien que tenga funciones tan importantes como las de mi marido, conservan sus oficios", remarcó la cantante."Imaginen que, ya sea una cantante o abogada, a partir del momento que una se casa con el jefe de Estado debe abandonar su trabajo. Es una cosa con la que no concuerdo como mujer. No tanto como esposa de un jefe de Estado, sino como mujer independiente que vive en 2008", añadió la ex modelo de 40 años."Mi oficio es el sentido de mi vida y me gusta mucho", añadió. El tercer disco de Carla Bruni, "Comme si de rien n'íétait", sale el viernes a la venta en Francia, Bíélgica, Suiza, España, Alemania e Italia. En la portada, la primera dama aparece sola caminando al borde de un lago rodeado de árboles vestida con un traje negro de chaqueta.Los textos fueron escritos "un poco antes, un poco durante y un poco despuíés" de conocer al jefe de Estado, en el otoño pasado, precisó. En íél aparecen canciones tituladas "Tu es ma came" (Tú eres mi droga), "Díéranger les pierres" (Descolocar las piedras) o "La possibilitíé d'une í®le" (La posibilidad de una isla), en referencia a una novela de Michel Houellebecq.Los beneficios de la venta de este disco irán a la Fondation de France, que redistribuirá el dinero en función de las urgencias, indicó la cantante, que no dará un concierto en público mientras su marido estíé en el Elíseo. Carla Bruni-Sarkozy dijo que comprende que algunas personas optarán por comprar o no su disco en función de la afinidad con su marido."La gente es libre de no comprarlo y de no escucharlo. Para mí contará si a la gente le gusta", dijo, al afirmar que comprende "todas las reacciones". Carla Bruni-Sarkozy, que ha acompañado a su marido al extranjero en visita de Estado pero raramente en desplazamientos en Francia, cree no jugar ningún papel político. En cuanto a la música, la cantante se dice seguidora de Bob Dylan y Billie Holiday. A su marido le gusta más Mireille Mathieu, Enrico Macias o Chimí¨ne Badi.
Un desconocido artista francíés llamado Thierry Desseux que sacó hace 5 años un disco producido por íél mismo que se llama exactamente igual que el que acaba de publicar Carla Bruni.Por REDACCIí“N los40.com Madrid (17/07/2008) --------------------------------------------------------------------------------Según la publicación digital de Le Post, Thierry Desseux asegura haber sufrido un perjuicio artístico. El cantante dice que "la señorita Bruni se ha invitado esta semana en mi página musical, como si nada. Por lo tanto, mi próximo álbum se llamará Alguien me ha dicho, como su primer disco. Tengo derecho, ¿no?".Bertrand De Labbey, agente de Bruni, es tajante a la hora de negar las acusaciones de plagio. "De ninguna manera hay plagio. El título Como si nada viene del nombre de una foto de su hermano muerto y ella ha querido rendirle un homenaje y al mismo tiempo hacer un guiño a su nuevo estatus de primera dama", expone el agente de la artista. Anteriormente habían pensado en llamar el disco El refugio Por otro lado, según Le Parisien, el nuevo álbum de la exmodelo francesa no esta teniendo mucho íéxito al igual que sucede en España donde no ha venido más 5.000 ejemplares.
París, 8 nov (EFE).- Carla Bruni, la esposa del presidente de Francia, Nicolas Sarkozy, considera la posibilidad de cantar en público "por causas humanitarias" aunque no tiene planeada gira de promoción de su último álbum. La ex modelo y cantante, que lanzó el pasado julio su tercer disco, declaró hoy en una entrevista en la cadena de televisión pública "Public Senat" que piensa en reanudar sus recitales, aunque no dio fechas."Como artista reanudaríé las giras cuando sea posible, quizás cuando mi marido ya no sea presidente de la República, ya se verá, o bien por causas humanitarias incluso durante su mandato, pero no tengo un programa en ese sentido", explicó Bruni.La primera dama de Francia aseguró que "no es muy difícil" la tarea de compaginar sus funciones oficiales con sus aficiones musicales y su actividad como cantante.Bruni publicó en julio "Comme si de rien n'íétait" ("Como si nada"), su tercer álbum, lanzado al mercado ya como esposa del presidente de la República."Tengo una vida muy privilegiada, muy sencilla, así que las funciones oficiales junto a mi marido son una cosa aparte", declaró Bruni, quien agregó: "todavía no he creado, aunque, bueno, estoy en ello, mi propia acción en tanto que esposa del jefe del Estado".La ex modelo y cantante se convirtió en la tercera esposa de Nicolas Sarkozy el pasado 2 de febrero en una ceremonia que tuvo lugar en el Palacio del Elíseo, residencia oficial en París del presidente de la República francesa.
La exmodelo, cantautora y actriz italiana Carla Bruni ha anunciado hoy que el próximo mes de enero presentará en vivo en España su nuevo álbum, «French touch», con dos conciertos que tendrán lugar en Madrid y Barcelona.Según el comunicado de la promotora, estas citas tendrán lugar en el Teatro Nuevo Apolo de la capital el día 10 y en el Palau de la Música de la ciudad condal el día 12, dentro del marco de la decimonovena edición del Festival Mil·lenni.«French touch», que ya se encuentra a la venta, ha sido producido por el legendario músico, productor y compositor David Foster, colaborador previo de artistas como Barbra Streisand o Whitney Houston, para reinterpretar clásicos de la música contemporánea.Popularizados por primeras figuras como The Rolling Stones, Depeche Mode o ABBA, Bruni (Turín, 1967) versiona en clave íntima y acústica temas emblemáticos como «Enjoy the silence», «Highway to hell» y «Crazy».Célebre modelo entre 1985 y 1997, Bruni dio el salto a la música con el álbum «Si j'étais elle» (1999), al que siguió el exitoso «Quelqu'un m'a dit» (2002), del que se publicaron dos millones de copias en todo el mundo. Le seguirían «No promises» (2007), «Comme si de rien n'était» (2008) y »Little French Songs» (2013).
Tras cuatro años alejada de los estudios de grabación (salvando una breve sesión para el single benéfico «Vole», el año pasado), Carla Bruni regresa con el álbum «French Touch», un nuevo trabajo en el que reinterpreta clásicos de mitos de la música contemporánea como The Rolling Stones («Miss you»), Depeche Mode («Enjoy the silence»), AC/DC («Highway to hell»), Lou Reed («A perfect day») o ABBA («The winner takes it all»), entre otros.Guiada por el legendario músico, productor y compositor David Foster, Bruni afronta estas versiones inspirada en el concepto que da título al disco, el toque francés. Un toque sentimental, cálido, íntimo y acústico. Antes de presentarlo en Madrid (10 de enero, Teatro Nuevo Apolo) y Barcelona (12 de enero, Palau de la Música Catalana dentro del Festival del Mil·lenni), la exprimera dama francesa nos concede diez estrictos minutos en los que se nos pide que nos ciñamos a su lanzamiento discográfico y no hablemos de política.¿Cómo surgió la idea de reinterpretar estos temas, en principio alejados de su sonoridad habitual?La idea fue de mi productor David Foster. Vine a verme a un concierto en Los Ángeles, y mi voz le encantó. Él además era el jefe de mi compañía discográfica en Estados Unidos en ese momento, y creo que estaba buscando a una artista para hacer un proyecto de este tipo. Al gustarle mi voz, y saber que ya pertenecía a su compañía, todo le cuadró.Suena usted muy natural en todas las grabaciones. ¿La idea era evitar la sobreproducción?Sí, David Foster es uno de los productores que mejor trabajan con la voz en todo el mundo, Ha trabajado con Céline Dion, Whitney Houston, Barbra Streisand, Donna Summer… ¡Por eso me hizo muy feliz que yo le gustara! En el estudio, David intentó sacar el sonido más puro posible a mi voz, mantener la sencillez, y a mí me encantó ese enfoque. Ha sido un placer inmenso trabajar con él.El «toque francés» fue también un concepto de punto de partida a nivel instrumental, ¿no es así?Sí, la idea es que se transmitiese ese «feeling» de la chanson. Por eso no podría haberse titulado «Italian Touch», aunque yo sea italiana de nacimiento ¡jajaja!Creo que ha elegido canciones por las que sintió un amor a primera vista.Sí, la gran mayoría del repertorio lo componen temas que me dejaron alucinada la primera vez que los escuché, que fueron amor a primer oído, ¡jaja! Algunos llevo mucho tiempo cantándolos en directo, antes incluso de que empezara a escribir mis propias canciones. Creo que fue muy importante cómo las trabajé en el estudio, ya que intenté imaginar que yo había escrito las canciones, para interpretarlas a mi manera olvidándome de quién era el autor.Lo más difícil de hacer versiones es llevarlas al territorio propio, y ese parece un buen método.Sí, eso es lo que creo. Lo mejor fue que nos salió así de forma natural, no requirió mucha premeditación ni mucho trabajo previo. Estoy muy contenta de haber conseguido esa naturalidad.¿Hay más canciones que le hubiera gustado incluir, y no pudo por falta de espacio?Sí, quizá unas doscientas (risas). Grabé veintidós demos, de las que diecisiete pasaron la criba para llevarlas al estudio. De esas, nos quedamos con once. Y, si le digo la verdad, no sé por qué no entraron las otras seis. Fue una selección muy difícil.Ha hecho un videoclip precioso para «Miss You». ¿Disfrutó el rodaje?Muchísimo. Lo dirigió un maestro del medio audiovisual al que admiro muchísimo, Jean-Baptiste Monino. Creo que hizo un trabajo soberbio. Y a mí me hizo muy feliz poder trabajar con él, cumplí un sueño que tenía desde hacía muchos años.Supongo que conoce en persona a los autores del tema, los Rolling Stones.Sí, los conozco desde hace mucho tiempo. Y de hecho estuve con ellos hace sólo unas semanas en París. Mick Jagger y yo somos buenos amigos.¿Cómo fue interpretar una pieza tan delicada como «Perfect Day» de Lou Reed?Oh, qué canción tan maravillosa. Llevo esperando toda la vida para grabar esta versión, se lo aseguro. Para mí es el perfecto vals moderno. Es difícil de cantar.La versión más sorprendente es probablemente la de AC/DC. ¿Es fan del grupo?Me gusta mucho el rock, por eso también he incluido «Jimmy Jazz» de The Clash. Habrá más rock si hago otro disco de versiones. No me atrevería a decir que soy una gran fan de AC/DC, pero sí soy muy, muy fan de ese tema. Es la perfecta canción ruidosa, para celebrar a lo grande con tus amigos. ¡Ha sido arriesgado hacerla en clave de jazz!En el disco hay una participación estelar de Willie Nelson. ¿Grabaron juntos, o envió su parte por internet?¡Nooo, no estuvimos juntos, qué pena! No pudimos encontrar tiempo y nos envió su parte. No tuvimos otra manera de hacerlo, pero aun así creo que ha quedado fantástico. Espero tener la ocasión de compartir una sesión de estudio con él algún día. Tiene que ser un personaje divertidísimo, ademas de una leyenda del country, claro.¿Su marido tiene una canción favorita del disco?Sí, es «The winner takes it all». Lo cierto es que es una canción muy triste y oscura, y aun así es la que más le gusta…¿Cómo serán sus conciertos en España? ¿Mantendrán el espíritu íntimo del disco o serán más moviditos?Los vamos a mantener fieles al espíritu del disco, sí. Íntimo y cercano, pero también habrá momentos diferentes en los que interpretaré otros temas antiguos de mi repertorio.Habrá seguido las noticias sobre Cataluña, claro.Sí, por supuesto. Pero prefiero no hacer ningún comentario al respecto. Es un tema demasiado delicado como para que yo me manifieste. No es asunto mío.¿Tiene planes de volver a componer sus propias canciones?¡Sí! Y de hecho ya lo estoy haciendo, estoy muy inspirada y estoy escribiendo casi todos los días. En cuanto termine esta gira quiero volver al estudio para grabar un nuevo disco de material propio, me apetece muchísimo.TEMAS
No es que estas cosas no pasaran antes, pero el concierto que anoche ofreció Carla Bruni en Madrid sirve de ilustrativo ejemplo de en qué va camino de convertirse la música pop en la actualidad: un inofensivo e intrascendente entretenimiento absolutamente desprovisto del menor atisbo de pasión o emoción; un juego insustancial para niños consentidos y aburridos.Todo fue correctísimo en la apacible velada del miércoles noche. Cuatro músicos de sobrada solvencia (piano, guitarra, batería y chelo), una puesta en escena sobria pero elegante, acústica impecable, un marco de la solemnidad del Teatro Apolo y un público heterogéneo, más bien entrado en años y que no daba la sensación de ser precisamente muy melómano. (Quizá el interés primero de la cita no residía precisamente en la música que se iba a escuchar en aquel auditorio).Igualmente correcta estuvo la propia Bruni, una mujer tan sensual y sofisticada como falta del menor gracejo cuando se mueve sobre las tablas de un escenario. Amable y simpática entre canción y canción, su interpretación de las mismas fue absolutamente gélida y falta de alma, lo que, en el caso del repertorio elegido, resulta mucho más difícilmente perdonable.Y es que la actriz, modelo y cantante italofrancesa venía a presentar su último disco, «French touch», en el que recoge once versiones de procedencia ciertamente dispar. La idea, no original pero quizá sí atractiva a priori, salió regular en el estudio, sobre todo por lo excesivamente evidente de buena parte de la selección. También por una producción –a cargo del reputado David Foster- demasiado plana y anodina.Pero la cosa se pone aún más peliaguda en la traslación de semejante material al directo. Y es que, por ejemplo, no basta con sacar los cuernos entre tímidas risillas para resultar mínimamente convincente cuando tienes la peregrina idea de hacer una versión de «Highway To Hell», de AC/DC. Una versión delicada y sofisticada en la que no es que no haya ni un ápice de la energía de la original; es que no hay prácticamente nada de nada. Una verdadera lástima.Puede que cuele el archiconocido y evidente «Moon River» o el «Please don´t kiss me» que interpretara Rita Hayworth en «La Dama de Shangai», pero se hace muy cuesta arriba escuchar «Perfect Day», «Jimmy Jazz» o la propia «Highway To Hell» en versiones tan desprovistas de su formidable y genuino carácter. Estuvieron en el escenario del Apolo las canciones de Lou Reed, los Clash o AC/DC pero el espíritu de todos ellos estaba anoche en otro lugar muy lejano del universo.
La glamurosa ex primera dama francesa y cantante Carla Bruni (51) no gana para disgustos: si a principios de julio una portada suya del Paris Match posando con Sarcozy (64) fue objeto de burla en las redes, ya que el ex presidente francés, que mide 1,66 cm, aparecía en la imagen más alto que su esposa, cuya estatura es de 1,75, ahora se ha tenido que tragar otro sapo. Y es que el concierto que tenía programado en Mallorca este 25 de julio, ha tenido que ser suspendido, ya que a menos de diez días de su celebración, no se habían logrado vender ni 200 entradas de las 2.500 que tiene el aforo de Port Adriano, en Calviá, donde todos los veranos se celebra un importante festival de música.Y no es que el desembolso fuera astronómico, ya que las entradas se vendían a un precio bastante asequible, 35 euros las más baratas, aunque, eso sí, el que quisiera compartir zona vip con Nicolas Sarkozy, quien se esperaba que acompañara a su mujer al evento, tenía que desembolsar 250 euros.Ante el descalabro económico que se le podía avecinar, la productora de Bruni, Ok Events Agency, decidió cancelar una gala a la que se había dado gran bombo y había despertado grandes expectativas mediáticas.La foto más emblemática del duelo de estilo entre la entonces Princesa de Asturias y Carla Bruni, primera dama de Francia, en 2009.GTRESSin embargo, tampoco es que la prensa estuviera contenta ni mucho menos, dadas las exigencias manifestadas por Carla Bruni, que iba a ofrecer una rueda de prensa el mismo día del concierto. Según el Diario de Mallorca, el encuentro estaba totalmente blindado, ya que se habían prohibido fotografías y cámaras de televisión así como preguntas relacionadas con la vida privada de la cantante, quien actualmente realiza una minigira veraniega por España promocionando su último disco, French Touch, y actuó el 5 de junio pasado en el festival de Pedralbes en Barcelona y este sábado 21 de julio lo hará en Peralada.Carla Gilberta Bruni, nacida en Turín pero afincada en Francia desde niña, fue una conocida top model en la década de los 80, que con el cambio de siglo decidió dar un giro a su existencia y convertirse en cantante. Casada con Raphaël Enthoven, hijo de un afamado editor literario y padre de su hijo Aurelien, en noviembre de 2007 copó las portadas de medio mundo al trascender su romance nada menos que con el presidente francés, Nicolas Sarkozy, recién divorciado de Cecilia Attias, con quien se casó en una ceremonia privada en El Elíseo en febrero de 2008 y con quien tuvo una hija, Julienne, nacida en 2011. Desde 2008 hasta el año 2012 se apartó de la música para ejercer como primera dama de Francia, acompañando a su marido en sus viajes oficiales al extranjero, como el que realizó a España en abril de 2009 en el que protagonizó un duelo de estilismo de alto voltaje con Doña Letizia, entonces Princesa de Asturias.
Con motivo de su regreso al mundo de la música tras siete años sin sacar un proyecto, Carla Bruni (52 años) ha concedido una de sus entrevistas más personales hasta la fecha. Son muchas las cosas que se han escrito sobre la exmodelo, sobre todo a raíz de su matrimonio con Nicolas Sarkozy y su papel como primera dama de Francia, pero hasta la fecha se había mantenido al margen de las informaciones y los rumores.«Cuando hablan de mí (en libros o documentales), no hablan de mí en su totalidad. Ni mi marido ni yo somos muy adeptos a la censura y eso que han escrito montañas sobre nosotros. Que la gente diga lo que quiera», ha dicho a Paris Macth. Aunque no le importe lo que hablen de ella, sí ha aclarado que se siente muy libre junto a su marido y tras 13 años juntos ha demostrado que lo suyo era amor y no interés: «La gente cree que lo único que me atraía de él era su posición. Lo que me atraía de él era él. Soy libre estando casada y dentro de este gran amor. Pensaba que el matrimonio era una prisión. Sin embargo, te da alas».Y prosigue: «Después de 13 años de amor, viajar con mi marido en un coche conducido por él, sin nadie más, improvisando, anulando todo lo que teníamos previsto para ir al mar. Sí, eso me encanta. Llegar a Knokke-le-Zoute al alba, extenuados y enamorados, me vuelve loca».Durante la entrevista también ha aclarado que lo más importante de su vida son sus hijos, Aurélien (19 años) y Giulia (9): «Siempre puse a mis hijos por delante. Y estoy muy feliz con cómo lo hice. Después, hay habitaciones que se quedan vacías». Está muy orgullosa de cómo les ha criado, pese a que no siempre ha sido fácil para ellos. «Ellos han crecido con la fama. Se sufre cuando tus padres no te quieren, no se ocupan de ti, son distantes. Pero cuando los hijos se sienten queridos, todo va bien», cuenta.También ha hablado sobre el feminismo y lo que ha visto a lo largo de su carrera. «Yo nunca he estado en una situación amenazadora. Nunca he sido una víctima. Nunca se me ocurrió subir a una habitación de hotel con un tipo como Weinstein. En nuestra generación estábamos muy atentas para poder salir corriendo», explica.