El cielo y el infierno, son estados de conciencia.
Una persona que piensa con amor, habla con amor y actúa con amor vive en el cielo, porque en el verdadero amor no hay temor, entonces imagina una vida sin tenerle miedo a nada, ni al mañana ni a la situación económica, ni a la perdida de la salud o la vida o los seres amados, imagina una vida con sabiduría, por que el amor trae sabiduría y con la sabiduría desaparece el miedo.
Una vida rodeados de gente de esa misma energía, en contraposición a eso una vida, con miedos, con angustias, sin entender la muerte de los seres amados, sin poder conservar la salud, intoxicándonos todos los días con los noticieros, y los pesticidas, rodeados de gente igual de miserable, eso es el infierno.