nathan bomey
La pandemia ha acelerado el uso de códigos QR, llevándolos de un estado de nicho a una herramienta esencial para empresas y especialistas en marketing.
No busque más allá del comercial del Super Bowl del domingo de nada más que un código QR flotante que envía a los usuarios al sitio web de Coinbase.
Según los números: 76 millones de estadounidenses escanearon un código QR en 2021, un 44 % más que en 2019, según eMarketer .
Se espera que aumente a 100 millones para 2025.
Importante: durante la pandemia, muchos restaurantes han reemplazado los menús físicos con códigos QR que los comensales escanean para examinar las opciones de comida y bebida.
Los especialistas en marketing ahora están preparados para adoptar la "gamificación" de los códigos QR, alentando a los usuarios a escanearlos para obtener ofertas, detalles de productos y reseñas, según eMarketer.
Sí, pero: los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley están haciendo sonar la alarma sobre los riesgos.
Nivel de amenaza: el FBI emitió una alerta en enero advirtiendo a los estadounidenses que los ciberdelincuentes “están manipulando los códigos QR para redirigir a las víctimas a sitios maliciosos que roban información financiera y de inicio de sesión”.
Si está escaneando un código físico, asegúrese de que no haya sido alterado. Por ejemplo, tenga cuidado con "una etiqueta colocada encima del código original", aconseja el FBI.
El resultado final: los códigos QR pueden ser útiles. Pero no haga clic a menos que haya verificado que la fuente es legítima, y asegúrese de que el sitio sea auténtico una vez que llegue a su destino digital.
