Los minoristas más grandes de Estados Unidos dicen que el crimen minorista organizado se ha convertido en un problema multimillonario, pero la efectividad de sus estrategias para resolverlo y la validez de los datos en general se han cuestionado.
En los últimos años, empresas como Home Depot, Lowe’s, walmart, mejor compra, Walgreensy CVS
han estado haciendo sonar la alarma sobre bandas organizadas de ladrones que saquean sus tiendas y revenden los productos en los mercados en línea.
Han invertido dinero en estrategias de prevención de robos , como estuches de plástico, detectores de metales, monitores con detección de movimiento y cámaras con inteligencia artificial, y han advertido que si el problema no mejora, los consumidores podrían terminar pagando el precio.
“El robo es un problema. Es más alto de lo que ha sido históricamente”, dijo el director ejecutivo de Walmart, Doug McMillon, a CNBC en diciembre. “Si eso no se corrige con el tiempo, los precios serán más altos y/o las tiendas cerrarán”.
