La compañía china dedicada a la fast fashion (moda rápida) tiene la intención de debutar en la Bolsa de Londres próximamente, pero las controversias relacionadas con las condiciones laborales de sus trabajadores planean sobre este estreno desde el principio. De confirmarse, la operación sería una de las más grandes hasta la fecha en Reino Unido: su valoración rondaría los 60.000 millones de euros, tal y como publicó Bloomberg a primeros de junio.