A medida que el mundo avanza hacia la electrificación, necesitará más litio . Se prevé que la demanda de litio, un ingrediente clave en las baterías que alimentan todo, desde vehículos eléctricos hasta teléfonos celulares, se acelere durante la próxima década.
Para lograrlo, una nueva generación de empresas emergentes está trabajando en formas novedosas de producir el valioso metal y promete abrir fuentes de litio sin explotar. También están luchando contra fuertes vientos económicos en contra, impulsando su tecnología en medio de una crisis actual del mercado.
Si bien la demanda de litio es de aproximadamente 1 millón de toneladas anuales en la actualidad, BNEF proyecta que llegará a 3 millones para 2030 y a más de 6 millones para 2050 según su escenario de transición económica, que supone que no se implementarán nuevas políticas para acelerar la transición a la energía limpia.
Actualmente, hay un exceso de oferta de litio debido, entre otras cosas, a una desaceleración en las ventas de vehículos eléctricos, lo que significa que se produce suficiente a través de métodos tradicionales para satisfacer la demanda en el corto y mediano plazo. Pero se necesita innovación para satisfacer la demanda a largo plazo impulsada por la transición energética, dijo Choi.
Lilac Solutions Inc., que ha completado cuatro proyectos piloto y dos plantas de demostración, ha recaudado más de 300 millones de dólares para comercializar su tecnología DLE, que se basa en perlas de cerámica para absorber litio.
Actualmente, está trabajando en la construcción de una planta de 5.000 toneladas en el Gran Lago Salado de Utah, cuya finalización está prevista para finales de 2026. Cuando se construya, será la instalación de producción de DLE más grande de Norteamérica, afirmó Sully.
Además de los desafíos tecnológicos, la puesta en marcha de la tecnología DLE ha resultado difícil desde el punto de vista económico. Hoy en día, el litio es barato y está ampliamente disponible, tras la caída de precios en 2023.
En su punto máximo, el hidróxido de litio para baterías alcanzó los 80.000 dólares por tonelada métrica antes de caer a 14.000 dólares en abril de 2024 en Estados Unidos y Europa.
