Logan, presidente de la Reserva Federal de Dallas, tiene experiencia en dirigir la economía durante el 11 de septiembre, la crisis financiera y la COVID-19.
La presidenta de la Reserva Federal de Dallas, Lorie Logan, es “alguien a quien hay que seguir de cerca”, dicen los expertos.
El 11 de septiembre de 2001, mientras muchos estadounidenses estaban paralizados por la conmoción, Lorie Logan ayudaba a mantener a flote el sistema financiero.
Después de refugiarse en una oficina en el sótano no lejos de las Torres Gemelas, Logan fue uno de los empleados del departamento de valores gubernamentales de la Reserva Federal que trabajó para garantizar que, en medio del caos, los bancos y las empresas comerciales tuvieran acceso a la liquidez del banco central para seguir en el negocio.