El extraño caso de la maleta con 134.000 millones de dólares en bonos falsos
El Departamento del Tesoro de EEUU disipó ayer las dudas sobre el extraño caso de los 134.500 millones de dólares en bonos del Tesoro que fueron confiscados a dos hombres con pasaporte japoníés en la frontera entre Suiza e Italia. Son falsos, pero no se aclara el misterio sobre que iban a hacer con esa desorbitada suma de dinero.
La historia que hay detrás de este anuncio es de película. El pasado 4 de junio, la policía italiana detuvo a dos hombres con pasaporte japoníés, de unos 50 años, en Chiasso, punto fronterizo entre Italia y Suiza. Habían encontrado escondidos en sus maletas lo que parecían 134.500 millones de dólares en bonos del Tesoro de EEUU.
En concreto, según los escasos datos que dio la policía italiana, se trataban de 249 bonos por valor de 500 millones de dólares y 10 de los denominados "Kennedy bonds", que se utilizan para transacciones entre gobiernos, por valor de 1.000 millones de dólares cada uno.
Y el misterio se agrandó despuíés de que los dos hombres, que tampoco se ha confirmado que sean japoneses en realidad por las autoridades del país nipón, fueron liberados, y no han trascendido sus nombres. Según la legislación italiana, tal y como afirman diversos medios, los hombres no habrían hecho nada ilegal ya que no trataron de obtener dinero con los bonos.
El Tesoro salió al paso ayer. Steve Meyerhardt, portavoz del departamento, aclaró que "son falsificaciones obvias". Según íél, los denominados bonos Kennedy no existen. Pero lo más importante es que tan sólo quedan en circulación unos 105.000 millones de dólares en bonos físicos, ya que desde 1986 EEUU los emite electrónicamente. Lo que pasa es que algunos inversores todavía no se han molestado en convertir los que tenían entonces.
Aunque, como reconocen las autoridades italianas, los fraudes con bonos del Tesoro no son raros, lo que sí que sorprende es la cantidad. Por eso ahora la investigación, en la que tambiíén está participando el servicio secreto estadounidense, se centra en saber quíé se iba a hacer con esta ingente cantidad de dinero. Y en Internet, tal y como recoge Bloomberg, se han disparado las teorías conspirativas.
La Mafia, Corea del Norte, terroristas, Venezuela...
La primera reflexión sobre la cantidad asusta: esa cantidad de dinero supone el PIB anual de Nueva Zelanda, podría comprar países como Croacia o Eslovaquia o podría haber financiado tres Juegos Olímpicos como los de Pekín. Es más, si esa cantidad hubiera sido real, esos dos hombres "japoneses" hubieran sido los cuartos acreedores de Estados Unidos, justo por detrás de Rusia, que tiene 138.4 millones de dólares en bonos y por encima del Reino Unido, que tiene 128.200 millones.
¿Cuáles son las teorías que circulan? Pues desde que eran agentes de Kim Jong-Il, presidente de Corea del Norte, que viajaban a Suiza a esconder el dinero, a posibles terroristas buscando comprar armas nucleares, pasando por la posibilidad de que Japón se estuviera deshaciendo de sus reservas secretamente o que fueran timadores nigerianos.
En el diario Financial Times se apunta a que Estados Unidos e Italia creen que se trata de la mafia italiana y sus conexiones con la japonesa, mientras que Reuters asegura que Venezuela ha negado tener nada que ver con el asunto. En la red incluso se habla de que Estados Unidos podría haber estado vendiendo estos bonos de manera subrepticia a Japón durante 10 o 20 años.