UN CUENTO DE GALLEGOS
por Víctor Carrato
El procesamiento de un empresario hotelero de nacionalidad española de iniciales MD, su hija, el liquidador de Banco Montevideo Escribano Osvaldo Oliver Melgarejo y dos auditores, desató un nuevo escándalo que pone otra vez en jaque al Banco Central del Uruguay (BCU).
Actualmente se investigan otros 12 casos que podrían ser similares al que refiere esta nota, con la diferencia que íéstos fueron autorizados por la propia Sala de Abogados del bcu.
Funcionarios del bcu retiraron profusa documentación de la sede central del ex Banco Caja Obrera, ubicada en 25 de Mayo y Treinta y Tres. Incluso uno de los documentos que se buscaban, vinculado al Banco Comercial, se logró encontrarlo en la casa del procesado escribano Oliver.
El hombre se llevaba trabajo para la casa cuando sus tareas lo desbordaban. Mientras tanto, varias personas continúan siendo aún indagadas por la justicia.
El viernes 5 de diciembre, la jueza Anabella Damasco entendió que el escribano Osvaldo Oliver recibió una “coima†de US$ 150.000, que pagó el dueño de un depósito al funcionario del bcu para recuperar su dinero.
El dinero de la coima hasta ahora no ha aparecido. Se perdió por el camino.
FUNCIONARIO “EJEMPLARâ€
El veterano empresario español MD tenía un depósito a plazo fijo de US$ 1.035.150 en Banco Montevideo. Cuando se desató la crisis bancaria del año pasado el hotelero se encontraba en España, adonde viajaba a menudo.
Preocupado por sus ahorros y no recordando exactamente el día que vencía su plazo fijo, MD dio instrucciones a un funcionario del Banco Montevideo, que actualmente pertenece al Nuevo Banco Comercial, para que no renovara su colocación y la pasara como depósito a la vista.
Según las fuentes consultadas por CARASyCARETAS, el funcionario no actuó en función de las órdenes dadas por el cliente a travíés de un fax y lo mantuvo como plazo fijo.
Estos fueron algunos de los argumentos que favorecieron la recomendación hecha por el doctor Alejandro Van der Maesen para sugerir que el cliente tenía razón en su reclamo.
Cí“MO SE PAGí“ LA COIMA
El abogado argumentó que se debía restituir el monto reclamado. Sin embargo, el administrador delegado por el bcu como liquidador de Banco Montevideo, entendió que existía una buena oportunidad para aumentar su peculio. Fue así que se llegó a conseguir el pago de una coima de US$ 150.000.
El pago se efectuó a travíés de un cheque, cuya libreta luego fue denunciada como perdida por la hija del empresario español. Por ello se le tipificó simulación de delito, cargo por el cual logró ser procesada sin prisión. Los dos auditores fueron enviados a la cárcel como coautores de cohecho calificado.
EL INFORME DE VAN DER MAESEN
El doctor Van der Maesen es uno de los abogados que quedó trabajando en el Fondo de liquidación de los Bancos Comercial, Caja Obrera y Montevideo, proveniente de íéste último. Sin embargo los liquidadores de los tres bancos actúan asistidos por los integrantes de la Sala de Abogados del bcu. Como director y supervisor de los fondos de liquidación actúa el contador Jorge Xavier.
El 23 de setiembre de este año el doctor Van der Maesen envió su informe al escribano Osvaldo Oliver sobre el caso del empresario español. Allí se dice que: “Con fecha 4 de febrero de 2003 el Sr. M.D. solicitó el reintegro con cargo al Fondo de Estabilidad del Sistema Financiero de la suma de US$ 1:035.150 con la que, según expresa el Banco de Montevideo, constituyó –sin su consentimiento– un depósito a plazo fijo.
El Departamento de Auditoría de este Fondo de Recuperación del Patrimonio Bancario (FRPB) informó con fecha 16 de junio de 2003 (aunque sin agregar elementos objetivos respaldantes) que es cierta la afirmación del gestionante, en el sentido de que dicho plazo fijo se constituyó sin su consentimiento.
En consecuencia, habiíéndose formulado la petición de pago con cargo al fesb dentro del plazo establecido al efecto, el suscrito no encuentra inconvenientes a que se acceda a lo solicitado.
Cabe señalar que de hacerse lugar a lo peticionado por el Sr. MD, ello no debe implicar reconocimiento de existencia de dolo por parte de los funcionarios intervinientes en la constitución del depósito a plazo fijo contabilizado por el Banco de Montevideo: no existe prueba del consentimiento del cliente para la constitución del depósito a plazo fijo (DPF), pero tampoco existe elemento objetivo alguno que permita fundar la imputación de responsabilidades funcionalesâ€
¿POR QUí‰ SE PAGí“ LA COIMA?
No se explica entonces la razón por la cual el empresario español debió haber pagado una coima cuando el propio abogado del Fondo de Liquidación recomendaba el reintegro de su depósito ya el 23 de setiembre.
En otro sentido, quedan pendientes las averiguaciones sobre el caso de los otros 12 depósitos. ¿La coima sólo quedó en Oliver o había alguien más arriba? ¿Sólo hay dos coautores del cohecho?
Siendo ya escribano, Oliver trabajó como ascensorista en la sucursal 19 de Junio del brou. Por lo menos se le conocen dos viajes realizados a Europa y cuentan quienes lo conocen que no le faltaba el dinero. Más aún cuando su esposa es tambiíén escribana funcionaria del bcu.
AVALADOS POR LOS ABOGADOS: Los doce casos autorizados por el bcu
Con el aval de los integrantes de la Sala de Abogados del bcu, hubo doce casos que fueron autorizados a retirar su dinero. Ellos fueron:
Del Banco Comercial:
Enrique Casañas US$ 31.000
Marcelo Míéndez US$ 50.470
Gisella Viera US$ 160.000
H. Grinberg y M. Gastaldi US$ 56.000
J.J. Mizrahi US$ 25.040
Juan Romero Cetraro Giglio y Agostina Vurro $ 200.000
R. Gil Ricoute $ 270.507
Marcelo Mario Bonanata $ 15:731.070
Del Banco Caja Obrera:
Bloomington Finance Inc. U$S 2:625.305
Gualberto Díaz US$ 143.583
Del Banco Montevideo:
Elba Paseiro US$ 115.000
Iván Grazú Díaz US$ 8.896
La Sala de Abogados del BCU está integrada por los doctores Hebert Bagnoli, Daniel Artecona, Beatriz Fernández Araújo y Ana María Rantighieri