El sector sanitario y los trabajos relacionados con el medio ambiente serán los que concentren los nuevos empleos que genere la economía de EEUU en la próxima díécada, según un informe que publicó el lunes la Casa Blanca.
El desempleo en Estados Unidos se sitúa ya en el 9,5 por ciento (se han perdido 6,5 millones de puestos de trabajo desde que comenzó la recesión) y se espera que en un par de meses alcance los dos dígitos.
La crisis económica ha llevado a la Administración del presidente Barack Obama a promover, entre otras medidas, un plan de inversión y gasto público valorado en 787.000 millones de dólares para reactivar la economía y generar nuevos empleos.
Con este informe titulado "Preparando a los trabajadores de hoy para los trabajos del mañana", el Gobierno analiza las capacidades que tendrán que tener los trabajadores para poder acceder a esos empleos y adecuar los sistemas educativos.
"Se prevíé que aumenten más rápido las ocupaciones que requieren mayor nivel de estudios que aquellas con menores requisitos de formación", sobre todo las que requieren un título asociado, un postgrado o un curso de especialización de formación profesional, indica el documento.
En el ámbito sanitario en concreto no sólo hace referencia a míédicos y enfermeras, sino a especialistas en gestión de información míédica y tíécnicos de laboratorio, dentro del plan de reforma que se propone acometer.
Desde que llegó al gobierno Obama busca cómo arreglar un sistema de asistencia sanitaria que, pese a ser más costoso del mundo, deja fuera a más de 47 millones de personas que no tienen un seguro míédico.
Otro de los ejes central de la recuperación económica propuesto por Obama es la inversión en la mejora del medio ambiente y la promoción de energías renovables que permitan al país reducir su dependencia económica.
Ahí se abre pues una oportunidad para ingenieros medioambientales, científicos y tíécnicos especializados en medio ambiente.
Estos empleos crecieron más que otras ocupaciones entre 2000 y 2006 y según las proyecciones del informe se espera que sigan creciendo hasta 2016.
Las empresas eólicas, fabricantes de turbinas o de componentes de energía eficiente para automóviles requerirán, por ejemplo, electricistas especializados y expertos para instalar elementos y realizar las reparaciones.
La Casa Blanca prevíé además que la caída de la industria manufacturera se modere y repunten algunos subsectores como el aeroespacial, en el que harán falta especialistas en sistemas y estructuras; y el farmacíéutico, que demandará desde químicos y científicos hasta empaquetadores y operadores de máquinas.
En este periodo se espera un eventual repunte de la construcción, lo que abriría las puertas de nuevo a profesionales del ramo que tambiíén tendrían una oportunidad gracias a la inversión de infraestructuras públicas.
"Los trabajadores estadounidenses deben estar preparados para cualquier cambio ante las oportunidades que surjan y tener una capacidad analítica firme", indica el informe.
Por eso, considera la Casa Blanca, será clave la flexibilidad de los trabajadores y los programas adecuados acompañados de ayudas económicas para ayudar a los estudiantes e incentivar la formación continua.