elmundo.es/Laura Rivera
Miami.- Una fortuna conseguida gracias a la recesión. Los bancos estadounidenses recaudaron más de 27.000 millones de euros en multas a sus clientes por descubiertos en sus cuentas, provocados por el uso de tarjetas, cheques y cajeros automáticos. Este es un servicio del que el consumidor "no puede escapar", según los organismos de Protección al Consumidor. El monto recaudado significa un ríécord en tiempos de crisis, una cifra no vista desde 1930.
"En menos de dos meses me han cobrado 460 dólares (322 euros) por pagos sin fondos, pero ha sido porque he depositado dinero y luego he pagado cosas. En la mayoría de los casos las compras entraron al sistema antes que mis depósitos. Los bancos se aprovechan de la crisis y de los que peor lo estamos pasando", se lamenta Silvia Cárdenas, comerciante de la ciudad de Coral Gables, en Florida.
Cuando una persona abre su cuenta bancaria, la entidad financiera asume que dará príéstamos de dinero si el cliente no tiene fondos. Asume tambiíén que el consumidor pagará una penalidad por este servicio que va desde los 18 hasta los 36 euros. "La mayoría de los bancos inscriben automáticamente a sus clientes en el programa de protección de descubierto, que tiene realmente un costo alto y representa miles de millones de los consumidores por año", dice Lauren Zeichner Bowne, abogada de Consumers Union.
Otro detalle es que, curiosamente, los bancos subieron sus penalizaciones por tener la cuenta sin fondos en el momento más crítico de la recesión. Se estima que aumentaron cerca del doble respecto a 2000. Esta realidad podría aumentar la hostilidad pública hacia el sector financiero, estiman las asociaciones de protección al consumidor.
Una encuesta a nivel nacional del Consumer Reports National Research Center reveló que muchas personas no entienden cómo funcionan los programas sobre decubiertos en la cuenta. El 39% de los encuestados cree que su banco negará o procederá sin costo si realizan una transacción cuando su saldo es insuficiente. Casi la mitad de los consumidores (48%) piensa que su tarjeta no funcionará si intenta retirar más dinero del que tiene en su cuenta.
Los datos de Moebs Services, una empresa de investigación, muestran que la crisis ha llevado a muchos bancos a levantar cargos en las tarjetas de críédito y los descubiertos con el fin de impulsar los beneficios. La media de la tasa de descubierto bancario aumentó de 17 a 18 euros este año, según Moebs.
Soluciones
La Reserva Federal anunció que está trabajando para reformar las normas sobre las cuotas por descubiertos, y sobre las tarifas aplicables a los clientes, algo que parece ser una prioridad dentro de la propuesta que el presidente Barack Obama le presentó a la administración de la Agencia de Protección del Consumidor.
"Cuando el cliente emite un cheque sin fondos nosotros no pagamos, pero si compra algo con tarjeta de debito sí, aunque no haya fondos; porque la persona ya compró el producto, y el pago debe hacerse", ha declarado a elmundo.es uno de los gerentes de sucursal de JPMorgan Chace Bank en Miami.
Para justificar las penalizaciones de 25 euros que cobra dicho banco en estos casos, dijo que "es por el servicio de príéstamo. Tenemos que hacerlo porque el banco tiene mucho riesgo". Sin embargo, comentó que ahora ofrecen la posibilidad de vincular una tarjeta de críédito a las cuentas de díébito, para poder deducir de la primera si se agotaran los ahorros.
"Si los bancos creen que los programas de protección al descubierto son realmente beneficiosos, entonces se les debe exigir a sus clientes que se registren antes de que ellos puedan cobrar tasas tan altas", afirma la abogada Zeichner Bowne. "La Reserva Federal debe poner fin a la inscripción automática en la aplicación de costosos programas de descubierto y darle a los consumidores la opción de aceptación o rechazo (opt-in o opt-out)".