ELmundo.es/David Vigario | Míérida
La Sociedad General de Autores de España no descansa. Y menos en verano, cuando las representaciones teatrales se multiplican. En la localidad extremeña de Zalamea de la Serena, famosa por la obra de Calderón de la Barca 'El alcalde de Zalamea', 600 vecinos la representan todos los años.
En la plaza del pueblo representan la venganza de Pedro Crespo, primero labrador y luego alcalde, que se tomó la justicia por su mano, en pleno siglo XVI y mató al capitán de los Tercios de Flandes por violar a su hija. Este verano, 180 niños participan en la función. Los 600 vecinos llevan ensayando desde hace meses y, en las últimas semanas, hasta pasadas las 2.30 de la madrugada.
Cuando los vecinos, con su esfuerzo, han conseguido que, a partir de esta edición, el evento sea declarado Fiesta de Interíés Turístico Regional, llega la Sociedad General de Autores (SGAE) e intenta cobrar al Ayuntamiento, organizador del evento, "entre 12.000 y 14.000 euros", según denuncia el alcalde de Zalamea, el contemporáneo, Javier Paredes.
Lo más curioso del caso es que la interpretación que recrean los 600 vecinos no es la literal de la obra de Calderón, sino una adaptación del autor Francisco Brines, que la donó hace unos años al pueblo de forma altruista y así se ha representado durante 15 veranos consecutivos.
Si al final la SGAE ejecuta su amenaza de cobro, el año que viene tendra que "realizar una adaptación libre del texto, pues ni tan siquiera vale que la adaptación de la obra haya sido un regalo del autor a toda la gente de Zalamea".
Según los datos aportados por el Ayuntamiento, la cantidad exigida por la Sociedad de Autores conllevaría que ni tan siquiera se pudiera hacer frente al pago de los gastos de la representación, que fundamentalmente se basan en los decorados y el vestuario de los 600 actores