El director gerente del FMI, Dominique Strauss-Kahn, ha declarado:
"Yo creo que los efectos serán sentidos cada vez más en Europa y no creo que las economías emergentes estíén inmunes.
Hay un papel que las economías emergentes ueden desempeñar para dar soporte al crecimiento global, por medio de políticas que fortalezcan la demanda domíéstica, incluyendo mayor flexibilidad cambiaria".