La Bolsa, en un momento clave
Cárpatos
En 1906, el científico británico Francis Galton (1822-1911), primo del famoso Charles Darwin, el propulsor de la Teoría de la Evolución, visitaba una feria de ganado. Siempre defendía la tesis de que el sufragio universal era un error y que sólo debían votar los más informados y aptos. En un determinado momento se fue a ver sortear una cabeza de ganado entre los asistentes. Para concursar había que escribir el peso correcto de la res en una hoja. El científico pensó que, teniendo en cuenta que la mayoría de los que estaban concursando sólo habían entrado en la feria por curiosidad sin tener ni idea de ganado (y así era), lo que iban a deducir sería un disparate que además confirmaría su tesis antisufragio universal.
Cuando terminó el sorteo, se entretuvo en recoger las papeletas del suelo y sacar la media de lo que habían puesto los partícipes. Era de 1.197 libras de peso. El animal pesaba en realidad 1.198 libras. Aquello cambió para siempre las poco democráticas ideas de Francis Galton.
En las Bolsas, desgraciadamente esta sabiduría de las masas no funciona. Lo normal es que suceda siempre lo contrario de lo que se piensa, es la ley de sentimiento contrario que guía muchas veces los pasos bursátiles.
Esta semana, una de las encuestas más prestigiosas entre gestores profesionales de carteras, la de Investors Intelligence, indicaba un grado de pesimismo extremo. Algunos medios publican estudios de lo que ha pasado en el mercado cuando esta encuesta ha dado lecturas tan negativas. Desde el 2000, cuando aparece un dato así, la mayoría de las veces se está en un suelo de mercado... Experto en las tendencias bajistas mayores, pues en estos casos se dan señales falsas.
Por ejemplo, en 2002 aparecieron muchas señales como íéstas y, sin embargo, el mercado siguió cayendo de forma brutal. En los demás casos las subidas posteriores fueron muy grandes. En el 2003 se vio antes de un cambio de tendencia que duraría años. A mediados de 2006, acertó con otra gran vuelta, y este verano acertó el gran rebote. Ahora aparece de nuevo. Una de dos: o estamos ante otra gran vuelta al alza o en una tendencia bajista mayor como la del 2002. Si no es así, el tiempo lo dirá. No va más. O se sube de forma furiosa o se cae sin remedio, momento crucial de mercado.
La clave para una recuperación duradera está en los bancos. Son el fundamento de los índices y no levantan cabeza. En el gráfico de arriba pueden ver superpuestos los sectoriales europeos de bancos (en rojo) y de telecos (en negro), y la línea roja de abajo es el cálculo del spread. Esa línea siempre descendente indica que, por ejemplo, los bancos lo hacen de forma constante peor que este sector y muchos otros, separando sus cotizaciones cada vez a un porcentaje mayor.
De momento todo son especulaciones. Todo menos una cosa: la tendencia de medio plazo sigue bajista y no hay que ir nunca contra tendencia. Si dicha tendencia cambia, ya hablaremos. De momento, con los problemas de las monolines, la crisis de críédito y los malos datos macro que se suceden, la mantienen inmutable.