Efe
Berlín.- El ministro español de Industria, Miguel Sebastián, ha criticado en Berlín la escasa información facilitada por el fabricante canadiense Magna sobre la operación de compra de Opel y ha asegurado que "cuanto más la conocemos, menos nos gusta".
"Falta ahora mismo información por parte de Magna. Ha habido una decisión que nos ha parecido sorprendente porque General Motors nunca vio la opción de Magna como la mejor opción", ha afirmado Sebastián antes de reunirse en el ministerio de Economía alemán con representantes de todos los países europeos con planta de Opel.
Sebastián subrayó que el Gobierno español y el aragoníés todavía no conocen "los detalles del acuerdo ni de la opción industrial", pero añadió que "cuanto más conocemos la opción de Magna menos nos gusta".
El ministro aseguró que el gigante automovilístico estadounidense GM "en todas su manifestaciones públicas, como privadas, no veía a Magna como la mejor opción" y que, por eso, hay que averiguar quíé es lo que ha llevado a un cambio de opinión tan "brusco y repentino".
La reunión tiene como objetivo hablar del reparto de las ayudas a 'New Opel', la compañía que surgirá de la venta al consorcio formado por el fabricante austro-canadiense Magna y el banco ruso Sberbank.
Magna planea suprimir 10.500 puestos de trabajo en Opel sobre una plantilla total de más de 50.000 empleados, de los que 7.500 efectivos trabajan en la planta zaragozana de Figueruelas.
'Todavía no hemos visto el menú'
Las críticas se dirigieron tambiíén indirectamente contra el Gobierno de la canciller alemana, Angela Merkel, ya que la reunión ha sido convocada oficialmente para hablar sobre las ayudas financieras que cada país aportara a 'New Opel', y no sobre el plan en sí.
"Cuando uno va a un restaurante primero mira el menú, luego come y luego paga la factura. Hoy nos han convocado para pagar la factura y todavía no hemos visto el menú", dijo el ministro.
Sebastián hizo hincapiíé en que España confía en que Opel tiene un "futuro brillante", pero únicamente si todos los implicados trabajan juntos en la solución de los problemas.
Aseguró que España pedirá a la Comisión Europea (CE) que "estíé vigilante" sobre el proceso de compra, e insistió en que "nosotros tambiíén lo estaremos".
"Todo tiene arreglo si se presenta un plan que sea viable a largo plazo y que estíé basado en condiciones económicas e industriales a largo plazo esto va a ganar el apoyo del Gobierno de España y el Gobierno de Aragón", explicó.
Alemania se ha comprometido a facilitar ayudas por un total de 4.500 millones de euros (6.566 millones de dólares), entre críéditos y avales.
El acuerdo anunciado la semana pasada por General Motors señala que la casa matriz estadounidense mantenga el 35% de las acciones, ceda el 55% al citado consorcio y el 10% a la plantilla.
La reunión se produce en un momento de tensión de los países europeos con plantas de Opel - España, Bíélgica, Reino Unido y Polonia- por considerar que la operación con Magna beneficia demasiado los intereses alemanes.
A ello se añade el escepticismo de que entrar en un negocio con Rusia, no sólo pueda constituir un traspaso de tecnología sino tambiíén una continua inyección de fondos.